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Latino que salvó vida de congresista lamenta poco control en venta de armas

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Daniel Hernández, el hispano calificado como un héroe por salvar la vida de la excongresista Gabrielle Giffords en un tiroteo en 2011 en Arizona, lamentó la persistencia de las “trabas legislativas” que impiden un mayor control en la venta de armas.

Al cumplirse hoy seis años del aquel suceso que se cobró la vida de seis personas y dejó a la exlegisladora con secuelas físicas, Hernández reiteró que la falta de control para la venta y uso de armas de fuego es un “problema nacional”.

“El país no ha aprendido nada, la violencia con armas de fuego sigue siendo un serio problema, tal como lo acabamos de ver y lamentar nuevamente en los hechos sangrientos ocurridos el viernes en Florida”, dijo a Efe.

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El hispano se refirió así al ataque perpetrado el viernes pasado en el aeropuerto de Fort Lauderdale, en el sur de Florida, en el que el exmilitar que sirvió en Irak Esteban Santiago abrió fuego con una pistola semiautomática en una zona de recogida de equipajes, en un incidente en el que mató a cinco personas y dejó heridas a otras seis.

“Debemos seguir luchando para fijar regulaciones que establezcan mas verificaciones al momento de comprar armas de fuego, ya sea que las compren en una tienda o por internet”, dijo Hernández, quien en los comicios del pasado noviembre resultó elegido legislador en la Cámara de Representantes estatal.

El 8 de enero de 2011, un pistolero disparó a un grupo de personas que participan en un evento público organizado por Giffords en un centro comercial en Tucson.

Como consecuencia del suceso, seis personas murieron y otras 13 quedaron heridas, entre ellas la excongresista que debió renunciar a su escaño para recuperarse de las secuelas que sufrió y que le dejaron problemas motores y de habla.

La pronta intervención de Hernández, quien entonces era un aprendiz en la oficina de la congresista, y sus conocimientos para aplicar primero auxilios fueron decisivos para salvar la vida de Giffords.

Desde entonces, Hernández ha luchado por lograr un mayor control en la venta de armas de fuego, un objetivo difícil de conseguir especialmente en Arizona, estado que entabló una acción legal contra la ciudad de Tucson por establecer un programa que permite la destrucción de armas confiscadas.

Arizona desea que estas armas sean puestas nuevamente a la venta.

“Este es el problema que tenemos en Arizona, donde la legislatura le da más derechos a las armas que a las personas que están muriendo”, lamentó Hernández.

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