Anuncio

México lamenta la exoneración de agentes fronterizos que golpearon y asesinaron al inmigrante Anastasio

Share

El Gobierno de México indicó que “lamenta profundamente y expresa su más enérgico rechazo” a la decisión anunciada ayer por el Departamento de Justicia de Estados Unidos de no presentar cargos penales contra los agentes fronterizos responsables de la muerte de un mexicano en 2010.

La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) indicó en un comunicado que el mexicano Anastasio Hernández Rojas falleció como resultado “del uso excesivo de la fuerza” el 28 de mayo de 2010 en las inmediaciones del Puerto de Entrada de San Ysidro, California.

“Esta decisión se toma a más de cinco años de ocurridos los hechos violentos en los que el connacional fue privado de la vida a manos de agentes de la Patrulla Fronteriza, quienes le aplicaron choques eléctricos en repetidas ocasiones y lo golpearon”, expuso la SRE.

Enfatizó que el mexicano recibió este trato “no obstante que la víctima se encontraba en el suelo, sometida y desarmada, y no representaba un peligro para los más de ocho agentes que se encontraban en el lugar”.

De acuerdo con la institución, “la determinación de las autoridades estadounidenses se contrapone al espíritu de colaboración impulsado por los Gobiernos federales de ambos países”.

“Asimismo, contraviene los esfuerzos de la red consular mexicana, que busca fomentar lazos de confianza entre la comunidad y sus autoridades policiacas y de procuración de justicia. La decisión genera la percepción de que las acciones indebidas de los oficiales encargados del cumplimiento de la ley quedan impunes”, apuntó.

Finalmente, la SRE reiteró “el indeclinable compromiso del Estado mexicano de brindar protección y asistencia consular a sus nacionales”.

“En el caso del connacional Anastasio Hernández, por medio del consulado general en San Diego, se continuará dando seguimiento al desarrollo del proceso civil en curso, que también se sigue como consecuencia de estos hechos”, acotó.

El Departamento de Justicia desestimó presentar cargos por la muerte de Hernández en la frontera de California con México a manos de agentes federales.

Anastasio Hernández Rojas, de 42 años, murió a consecuencia de una brutal paliza que le fue propinada por agentes federales en el área de deportaciones entre San Diego (California) y Tijuana (México).

Sin embargo, el Departamento de Justicia no encontró pruebas suficientes para presentar cargos penales, y dio por válida la versión de los agentes de que el uso de la fuerza fue “necesario” para contener a Hernández.

La familia de la víctima ha promovido un caso civil contra ocho agentes y cuatro supervisores, bajo el argumento de que éstos violaron los derechos de Hernández. Un juez federal en San Diego ha determinado que el caso puede ir a juicio.

Anuncio