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Mujeres avanzan en el sector pesquero del estado mexicano de Chiapas

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EFE

La pasión por la pesca es lo que ha motivado por más de 20 años a Guadalupe De la Rosa a desafiar las aguas del Océano Pacífico en busca de peces, crustáceos y moluscos, actividad que realizan miles de mujeres del suroriental estado mexicano de Chiapas.

De más de 20.000 pescadores establecidos y empadronados a lo largo de la costa de Chiapas, alrededor de 2.000 son mujeres que día a día participan con su trabajo en la industria alimentaria pesquera y acuícola.

La participación del sector femenino es especialmente activa en ciudades como Arriaga, Tonalá, Pijijiapan y Tapachula, donde se encuentran establecidas empacadoras que distribuyen los productos de esta zona al resto del país, señala Martín Ruiz Ovando, presidente de la Federación de Sociedades Cooperativas de la Bahía de Paredón.

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“A veces son las mismas mujeres de los pescadores que se dedican a la pesca de la jaiba o de otro tipo de especies, a descamar (quitar las escamas) y también van a los esteros a realizar su pesca. No ha sido fácil pero dentro de la misma familia hay mujeres que tienen valor de poder entrar al mar a practicar la pesca, que es la actividad principal de Paredón”, expone.

Guadalupe señala que con esta actividad ha sacado adelante a su familia. Hoy tiene hijos a quienes les puede pagar sus estudios y a quienes en su tiempo libre les enseña el arte de pescar.

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que las mujeres que laboran en el sector lo hacen a través de la acuacultura y la pesca, principalmente de camarón, sardina y moluscos. Muchas de estas mujeres son madres solteras que a través de esta actividad obtienen ingresos económicos para mantener a su familia.

“(Desde ) los seis años sé pescar, sé jaibiar. En alta mar, tiburón dorado, pargo, huachinango, robalo y de todo. Es algo difícil en cuanto hay norte (mal tiempo) que a veces no nos deja pescar, pero siempre encontramos (pescado)”, expresa a Efe Guadalupe.

Las mujeres en Chiapas cada día van ganando terreno en la actividad pesquera, a la vez que procuran organizarse mejor para obtener más oportunidades que garanticen la sostenibilidad de sus ingresos en beneficio de sus familias y mejorar la seguridad de la actividad que realizan.

Señalan que también se necesita mejorar, modernizar y equipar adecuadamente las instalaciones para recibir en óptimas condiciones el producto del mar, porque actualmente tratan de subsanar los problemas de sanidad que tienen a pesar de los esfuerzos que realizan.

La organización y la solidaridad entre las mujeres que se dedican a la pesca ha dado como resultado la creación de una cooperativa para establecer granjas acuícolas dedicadas a la producción de mojarra tilapia, una de las variedades de peces que más se comercializan en Chiapas, un opción para elevar sus ingresos y poder mantener esta actividad como un medio de sustento.

Así lo manifestó Rosa Villalobos Iglesia, presidenta de la Cooperativa Comerciantes Unidas de la Bahía de Paredón. “Tenemos pensado algo más productivo, más grande, que nos veamos en un mercado mejor que el que tenemos ahorita. Que todo mundo nos conozca y que vean cómo está nuestra bahía. Que vengan y nos visiten para que vean lo que sale de producción”, expresa.

Según estadísticas a nivel nacional son más de 22.000 mujeres que se dedican a la pesca, de las que 72 % se dedican a la producción primaria, a la pesca como tal, y el 28 % restante al procesamiento de los productos pesqueros y acuícolas.

A nivel mundial, las mujeres representan alrededor del 50 % de las personas que laboran en este sector, que se involucran en diversas actividades desde la pesca en sí hasta el procesamiento primario y secundario, así como a la comercialización.

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