Desalojan a empleados de la Fiscalía de Quintana Roo en Cancún por amenaza

Trabajadores de la Fiscalía General del estado mexicano de Quintana Roo en la ciudad turística de Cancún fueron desalojados esta tarde por la amenaza de un nuevo atentado, confirmaron autoridades de la entidad.

Alrededor de las 17.40 hora local (22.40 GMT) se activaron los protocolos de seguridad al darse a conocer una nueva amenaza sobre las oficinas que fueron atacadas el pasado martes, lo que obligó a desalojar a las personas que se encontraban en el lugar.

A través de las cuentas oficiales de la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo y de la Fiscalía General se dio a conocer que ante la amenaza recibida se determinó la evacuación preventiva de la dependencia.

La zona donde se encuentra el edificio de la Fiscalía fue nuevamente acordonada por elementos de la Gendarmería Nacional y el Ejército Mexicano. Aunque finalmente se determinó la falsedad de la amenaza, la mayoría de los empleados ya no regresaron a las instalaciones, pues ya casi era la hora de salida.

Por otra parte, esta mañana durante la destrucción de armas recolectadas por el Ejército como parte del programa “Canje de Armas”, en la sede del 64 Batallón de Infantería en Cancún, el fiscal estatal Miguel Ángel Pech indicó que las armas que se usaron durante el ataque a la institución fueron entregadas a la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía nacional).

“Las armas de fuego utilizadas, todas del uso único y exclusivo del Ejército y Fuerzas Armadas, ya fueron entregadas a la PGR para que realicen sus investigaciones, pues es un delito de su competencia”, explicó.

Se trata de cuatro armas cortas y seis largas, incluyendo un lanza granadas.

Esta noche se puso formalmente en marcha el operativo “Lluvia de estrellas” de la Policía Federal, que tiene como principal objetivo reforzar la seguridad de Cancún.

En el operativo participan más de 350 agentes y más de 80 patrullas que recorrerán toda la ciudad y la zona turística.

El pasado martes se produjo un ataque a la sede de la Fiscalía estatal en Cancún que dejó cuatro muertos, que siguió al tiroteo del lunes en una discoteca en Playa del Carmen, también en Quintana Roo, que acabó con la vida de cinco personas.