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Quedan prohibidos los negocios de masaje en esta ciudad por ser fachadas de prostitución

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A simple vista parecen negocios de masajes que le ofrecen a la comunidad especialistas en este rubro para curar sus malestares corporales, pero no es así, dice una ciudad del condado de Los Ángeles.

Los negocios de masajes se han convertido en fachadas de actos ilícitos como la prostitución y el tráfico de humanos, por este motivo el concejo municipal de Pico Rivera vota a favor de extender la prohibición de nuevos negocios de este tipo.

La prohibición se prolonga un año como parte de un esfuerzo para erradicar este problema en el sur de California, donde se ve más la trata de blancas.

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Sin embargo, ocho negocios de masaje permanecen abiertos en Pico Rivera, aunque por ahora no se les ha encontrado ninguna violación.

El paso de la pequeña ciudad de unos 63 mil residentes, se da un año después del cierre de un negocio en el Bulevar Rosemead, donde una mujer estuvo dispuesta a prestar sus servicios tras una solicitación de un agente en cubierto.

El negocio de nombre Diamond Massage acordó cerrar sus puertas por violación a la prohibición, según la investigación realizada por la Oficina de Tráfico de Humanos del Sheriff del Condado de Los Ángeles.

Esta es la tercera vez que se extiende la prohibición en esa ciudad.

De acuerdo a la Línea Directa Nacional de Tráfico de Personas, más de 1,300 casos de trata de personas fueron reportados a las autoridades en el estado el año pasado.

Steve Carmona, director de Desarrollo Comunitario y Económico, sostuvo que la ciudad se encuentra trabajando en estrategias para asegurarse de que cada negocio es legítimo.

“Examinaremos medidas adicionales que podamos tomar para ayudarnos a evitar que estas operaciones de tipo ilícito entren en la ciudad”, dijo Carmona.

Por ahora la ciudad creó una lista de negocios de masajes existentes, tomó fotos y creó documentos que fueron proporcionados al Departamento del Alguacil para futuras investigaciones.

Por ahora, los oficiales del condado de Los Ángeles consideran las inspecciones anuales de las salas de masajes, pero algunos dicen que los honorarios podrían afectar a los terapeutas respetuosos de la ley.

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