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¿Pueden 60 minutos limpiar 365 días de actos de Trump? Responden expertos

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Como película de la Guerra de las Galaxias, el país está atento al primer discurso del Estado de la Unión del presidente Donald Trump. Sin embargo, muchos no esperan algo inspirador o alentador, principalmente entre el sector inmigrante.

Francisco Moreno, portavoz del Consejo de Federaciones Mexicanas (COFEM), apunta que un discurso de una hora no puede limpiar los hechos de todo un año, principalmente porque el presidente es cambiante en sus decisiones.

“Básicamente no esperamos gran cosa en el Estado de la Unión. Sí estamos atentos al seguimiento del Congreso, pero todos sabemos que Trump puede decir una cosa hoy y mañana hacer algo completamente diferente”, sostiene Moreno.

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“Podría decir algo favorable como una negociación para favorecer a los beneficiarios de Daca, pero querrá fortalecer el muro y las deportaciones. Para nosotros la única forma de que el presidente limpie su nombre es ofreciendo una reforma migratoria amplia parecida a la amnistía, de otra forma todo lo que diga no cuenta”, agregó Moreno.

El lunes, Trump habló brevemente sobre el discurso en una sesión de fotografías de la Casa Blanca, diciendo que esperaba que los demócratas trabajaran con él en el plan de inmigración porque “los republicanos realmente no tienen los votos para hacerlo de otra manera”.

Lo llamó “un gran discurso, un discurso importante”, que abarcaría “mucho territorio”, y agregó: “Tenemos muchas cosas para discutir y las discutiremos, y espero que lo disfruten”.

Angélica Salas, directora ejecutiva de Chirla, recalca que en su opinión Trump ya no puede cambiar la imagen fría y racista que ha dado a conocer al mundo entero.

En lo que se refiera a los inmigrantes, Salas afirma “es muy claro que no es amigo de la comunidad. Durante su discurso podrá decir que hay una vía para los ‘soñadores’, pero esto ha sido en base de la presión de activistas, negocios, artistas y muchos que saben por lo que están pasando estos jóvenes”.

“Nada cambia el hecho de que a cambio de darle alivio a los ‘soñadores’ quiera negarles el derecho de pedir a sus padres, crear un muro con 25 millones de dólares, y contratar más jueces de inmigración para agilizar las deportaciones”, abundó la activista.

A juicio de Salas “la comunidad necesita crear un movimiento donde todo líder y político local electo respete a los inmigrantes y no se guíe por el racismo”.

A un año de su presidencia, Trump ha ampliado el número de delitos penales por los cuales los inmigrantes indocumentados pueden ser deportados.

Asimismo, anuló el programa Dapa, sometido por el presidente Barack Obama con el que protegía de la deportación a casi 5 millones de inmigrantes indocumentados que fueran padres de ciudadanos estadounidenses o de residentes legales.

De igual forma, canceló el Estatus de Protección Temporal (TPS) para 58,000 haitianos, 5,000 nicaragüenses y más de 260,000 salvadoreños.

Funcionarios de la Casa Blanca dijeron que aparte del tema de Daca, Trump discutirá los empleos y el avance de la economía estadounidense.

En el informe, destacan que se incluirán los recortes tributarios recientemente adoptados, así también pedirá a los legisladores que aprueben su plan de infraestructura para reparar carreteras y puentes y modernizar aeropuertos.

Además, se espera que hable sobre temas de seguridad nacional, incluida la actividad de misiles balísticos y nucleares de Corea del Norte, y también la necesidad de políticas de comercio e iniciar una renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con México y Canadá.

Por su parte, varios legisladores demócratas han dicho que boicotearán el evento. Algunas mujeres demócratas que asistirán planean vestirse de negro en apoyo del movimiento #MeToo contra el acoso sexual.

La noticia básica es que Trump es el presidente menos popular en este momento de su mandato.

En una encuesta reciente, elaborada por NBC/Wall Street Journal, el magnate obtuvo una calificación de aprobación del 39 por ciento en todo el país; la cifra de aprobación más baja en la historia para cualquier presidente moderno después de su primer año en el cargo.

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