Piden que LAPD elimine división que usaba ‘perfil racial’ para detener conductores

Una docena de organizaciones comunitarias convocan la eliminación de una división de élite, del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), en el sur de la ciudad, que detiene a los conductores, según ellos, basándose en perfiles raciales.

La acción llega tras un reportaje del periódico Los Ángeles Times, que recientemente reveló la manera en la que opera la división y sus estadísticas de detenciones.

En la carta dirigida al alcalde, jefe de policía de Los Ángeles y la Comisión, los grupos, que incluyen la Unión Americana de Libertades Civiles de Southern California, Children’s Defense Fund California, Community Coalition y el Local 99 de SEIU, sostiene que el trabajo de la División Metropolitana “llevó a la encarcelamiento y hostigamiento de personas afroamericanas y latinas, exacerbando las disparidades raciales y de riqueza en la ciudad de Los Ángeles’’.

Para combatir una oleada de delitos violentos, el LAPD duplicó el tamaño de su División Metropolitana de élite en 2015, creando unidades especiales para atacar ciertas áreas donde había más criminalidad, informó recientemente LA Times.

Para 2018, la cantidad de conductores detenidos en la región era casi 14 veces más que antes de la expansión, pero casi la mitad de los conductores se detenidos eran de color, lo que ha ayudado a aumentar la proporción de afroamericanos detenidos por el LAPD en general del 21% al 28% en una ciudad que es 9% por ciento negra, según el análisis del periódico.

Alberto Retana, presidente de Community Coalition, señala que “casi la mitad de los conductores detenidos por la División de Metro son afroamericanos, en una ciudad con un 9% de negros, es casi imposible decir que el perfil racial no es un factor en esto”.

“Ahora es el momento de invertir en nuestra comunidad y alejarnos de las estrategias de perfiles raciales opresoras que crean desconfianza, dañan a la comunidad y descartan datos reales”, sostuvo.

Los datos recientes sugieren un gran paso atrás hacia la creación de confianza entre el LAPD y nuestra comunidad local, dijo April Verrett, presidente de SEIU 2015.

“El racismo sistémico todavía existe en todos los niveles de la aplicación de la ley y más allá. Hay una gran oportunidad para que el Departamento de Policía de Los Ángeles demuestre un liderazgo real en la comunidad del sur de Los Ángeles”, indica.

El alcalde Eric Garcetti dijo el mes pasado que la oficina del inspector general llevará a cabo una auditoría de la unidad.

“Los angelinos merecen entender el cuadro completo cuando algo fuera de lo común sucede con cualquiera de nuestros agentes”, dijo Garcetti, haciendo hincapié en que se debe de obtener primero la “información en lugar de tener especulación ‘’ a través de la auditoría.

Sin embargo, para este jueves, el mismo alcalde le ha ordenado al jefe de policía que priorice otros elementos de la estrategia integral de reducción del crimen, más allá de las paradas de vehículos, hasta que se obtenga más información sobre el caso.

El informe de la OIG detallará “la historia y no sólo las estadísticas ‘’ sobre las políticas de la división, dijo.

Los datos analizados por LA Times no muestran por qué un oficial individual detenido sobre un controlador, y no contiene información sobre si un motorista fue registrado, multado o arrestado después de la parada, ni puede la información probar que los agentes están comprometidos a seguir un perfil racial. Sin embargo, los activistas dicen lo contrario.

Shimica Gaskins, del Fondo de Defensa de los Niños de California, dijo que es momento en que los defensores se deben unir en torno a la despenalización y el cambio a la inversión en los jóvenes y comunidades.

“No permitiremos que este exceso de políticas quede sin control”, dijo.

Los defensores de los derechos civiles dicen que las disparidades raciales reveladas por el análisis del periódico es demasiado extremo para ser explicado por otros factores, y preocupante para un departamento que ha pasado el último cuarto de siglo intentando reparar su fracturada relación con las minorías.