Conductores en el Sur de California recorren las carreteras más peligrosas de EE.UU.

Las autopistas 710 y 215 que recorren diferentes ciudades en el Sur de California se ubicaron entre las 10 carreteras más peligrosas de Estados Unidos, en donde fallecieron 22 personas en el 2013, según un reporte sobre accidentes de tráfico.

Con base a datos de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras, Vox.com indicó que en toda la nación murieron 32,719 personas, siendo California el segundo peor estado, con 2,772 víctimas de accidentes.

Jesús Girón, chofer de camiones, no se sorprende con el reporte. A su juicio, la autopista 710, que se extiende de Los Ángeles a Long Beach es peligrosa por la elevada cantidad de vehículos pesados que circulan hacia el puerto.

“Los conductores salen rápido a hacer sus entregas, tienen que trabajar y hacer su dinero”, explicó sobre la velocidad con que muchos traileros van por las carreteras. “Antes era peor, había menos carriles, pero ahora hay más traileros”.

La autopista 710, cuya extensión es de 23 millas, registró tres accidentes por cada 10 millas. En el 2013 fallecieron 8 personas, ubicándose en el segundo lugar en toda la Unión Americana, por detrás de la interestatal 285 en Georgia, donde murieron 29.

Entretanto, la carretera 215, que va desde Temecula hasta San Bernardino, fue ubicada en el décimo lugar. Por cada 10 millas, en esta autopista se reportan 2 accidentes. Hace dos años, murieron 14 personas.

“El problema se da cuando uno no conoce las carreteras y maneja distraido”, manifestó Jacobo Caballero, chofer que circula en estas autopistas con regularidad, asegurando que lo mejor es manejar con precaución.

“Los accidentes ocurren cuando se juntan carriles, si uno no se fija al entrar al ‘freeway’ te chocan. A veces no te dan chance y el otro carro viene a alta velocidad”, valoró el joven.

En el reporte, se evaluaron 315 carreteras interestatales a nivel nacional. La autopista 5, cuya longitud es de 1,000 millas, registró 72 accidentes fatales, la mayor cifra en una carretera de California, pero debido a su extensión tiene la menor probabilidad global de mortalidad.

“Estas carreteras tienen mucho tráfico, son las más utilizadas, por eso tienen más accidentes”, dijo a Hoy Ramberto Salcido, portavoz de la Patrulla de Caminos, destacando que lo mejor es poner atención en la ruta que se recorre.

Según el oficial, la distracción puede costarle la vida a cualquier chofer y con la llegada del invierno la precaución tiene que ser mayor, por el aceite y agua que queda sobre la carretera, deslizándose los vehículos con facilidad cuando se maneja a alta velocidad.

“Lo que se aconseja es disminuir la velocidad si el tráfico se detiene, para tener el tiempo necesario de parar antes de llegar al carro que lleva adelante. Con lluvia manejar es más peligroso, lo importante es manejar con cuidado”, concluyó Salcido.