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Palizas y humillaciones como castigo en la escuela

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Yo recuerdo a mi abuelo contándome que cuando iba a la escuela, los frailes les pegaban con una regla en los dedos. Eso sería en 1920-1925. Hace casi cien años. Por suerte, ahora en las escuelas europeas, creo que no se infringen castigos físicos. En Uganda sí. Se golpea a los niños con una vara, una piedra, una silla, vamos con lo que se tenga a mano.

Por desgracia, lo viví en mi escuela en Uganda. Le pregunté a Grace, el director, que opinaba sobre los castigos físicos, sobre golpear a los niños. El me explicó que: “Los americanos llegaron a Uganda queriendo imponer los derechos humanos, luego los derechos de las mujeres, más tarde los derechos de los niños y por último, lo que faltaba, los derechos de los animales. Ya no puedes coger un pollo por el cuello porque resulta que los animales también tienen sentimientos. Nuestra cultura es otra”.

Continué: ¨Entonces, ¿te parece bien que se les pegue a los niños?¨

¨Primero los niños tendrían que respetar los derechos de los adultos y así, luego no necesitaríamos golpearles. Nosotros no les pegamos porque sí. Les pegamos para que aprendan. Si por ejemplo un niño llega tarde a la escuela se le golpea en las piernas para que entienda que tiene que correr más para llegar a tiempo; si un niño escribe mal, se le pega en las manos para que cuando vaya a escribir preste más atención. Es una forma para recordar que tienen que portarse bien¨.

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Pienso que esa clase de castigos físicos no son buenos para los niños. Fomentan la violencia a la hora de resolver un conflicto, además de interferir en su proceso de aprendizaje, su inteligencia y emotividad. Y por supuesto, también pueden sufrir secuelas físicas.

En Uganda he vivido situaciones que jamás pensaba ver. He visto como una maestra golpeaba a unos niños con una vara (como podréis ver en el video). Recordarlo, me pone los pelos de punta. Aun puedo revivir el sonido del golpe y sus caritas de pánico, mientras esperaban su turno para ser golpeados; he llegado a una clase donde los niños estaban tumbados en el suelo boca abajo, debajo de los pupitres; en otra ocasión, me encontré a un grupo de alumnos arrodillados en la calle, como castigo a su comportamiento.

Espero que este blog sirva para que tomemos conciencia de la situación de otros seres humanos, que por desgracia, han nacido en un país donde no se respeta ningún tipo de derecho ni ley. Por favor compartir, para que llegue a manos de alguien con el suficiente poder y corazón para parar y cambiar esta horrenda realidad.

@Pcamdom #SoñadorasdeSueños

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