Anuncio

Panamá entrega a militar venezolano prófugo

Manifestantes aplauden y gritan a favor de Lilian Tintori, esposa del encarcelado líder opositor Leopoldo López, tras escuchar sus palabras durante una protesta antigubernamental en Caracas, el sábado 30 de mayo de 2015. Miles de opositores salieron el sábado a las calles de Caracas y otras siete ciudades del país para reclamar la liberación de los presos políticos y protestar contra el gobierno por la crisis económica profunda que agobia a los venezolanos con una inflación galopante y escasez de alimentos y otros productos básicos.

Manifestantes aplauden y gritan a favor de Lilian Tintori, esposa del encarcelado líder opositor Leopoldo López, tras escuchar sus palabras durante una protesta antigubernamental en Caracas, el sábado 30 de mayo de 2015. Miles de opositores salieron el sábado a las calles de Caracas y otras siete ciudades del país para reclamar la liberación de los presos políticos y protestar contra el gobierno por la crisis económica profunda que agobia a los venezolanos con una inflación galopante y escasez de alimentos y otros productos básicos.

(Fernando Llano / AP)
Share

Las autoridades de Panamá entregaron al teniente de la aviación Eduardo Figueroa Marchena, requerido en Venezuela por su presunta relación con una conspiración para derrocar al presidente Nicolás Maduro.

“Ya se encuentra en Venezuela el Tte. (Av) Eduardo José Figueroa Marchena, quien fue capturado en Panamá por notificación roja de Interpol”, dijo el jueves el ministro de Relaciones Interiores, mayor general Gustavo González López, en su cuenta de Twitter.

“Figueroa Marchena está implicado en los atentados golpistas de febrero de 2015, los cuales tenían seis objetivos a destruir en Caracas”, indicó el ministro en otro tuit.

Anuncio

“Figueroa tenía la misión de provocar los ataques a Telesur, Palacio Presidencial, Poder Electoral, Ministerios del Interior y Defensa (y) DGCIM (un cuerpo de inteligencia militar)”, agregó el alto funcionario, sin dar otros detalles.

Maduro dijo que dirigentes opositores y funcionarios estadounidenses, que no mencionó, estaban involucrados en la intentona golpista, y sin mostrar pruebas, acotó que la llamada “Operación Jericó” implicaba el uso de un avión Tucano para atacar el palacio presidencial, la sede de la televisora regional Telesur, entre otros objetivos en Caracas.

Washington entonces calificó de “risible” que el gobierno venezolano le atribuyese responsabilidad por los problemas que acosan a la nación sudamericana. Maduro acusó después al vicepresidente Joe Biden de conspirar para derrocarlo.

En mayo pasado, al menos una decena de militares activos y retirados, incluso un general de la aviación, fueron condenados en su mayoría a ocho años de prisión acusados de participar en la referida conspiración.

La sentencia sobre el grupo se produjo luego que el 12 de marzo pasado el presidente Maduro denunció que había sido desarticulado un plan para ejecutar un golpe de Estado y asesinarlo junto con otros dirigentes oficialistas. Entonces se informó de la detención del grupo.

Maduro — a semejanza de su predecesor, el fallecido Hugo Chávez — ha denunciado durante sus más de dos años de gobierno unos seis planes de magnicidio y más de dos decenas de actos de sabotaje y complot.

La oposición ha desestimado esas denuncias y asegura que forman parte de una estrategia para distraer la atención de los venezolanos de los graves problemas que padece el país. Maduro asumió el mando en abril de 2013 tras la muerte de Chávez.

Venezuela está sumida en una aguda crisis económica, con una inflación galopante que el año pasado cerró por encima de 64%, severos problemas de desabastecimiento y una recesión que se prevé se agrave este año por la caída de los precios del petróleo, la principal fuente de ingresos del país.

Anuncio