Anuncio

México se reúne con delegados de Acnur para atender a solicitantes de refugio

Share
EFE

El Gobierno de México se reunió este martes con una delegación de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) para abordar la situación de los solicitantes de refugio en el país latinoamericano.

En un boletín, la Secretaría de Relaciones Exteriores informó que se había reunido con la Oficina del Coordinador Residente de la ONU en México y la Acnur en México y con miembros de su oficina regional.

En el encuentro trabajaron “en un plan integral y coordinado para responder al incremento del flujo de personas solicitantes de la condición de refugiado en el país”, informó la Cancillería.

Anuncio

Durante esta reunión se analizó una propuesta de trabajo coordinado en Centroamérica para abordar el desafío que supone el desplazamiento desde la zona de una manera efectiva y sostenible.

“De esta forma, se busca dar prioridad a la protección de vidas, de los derechos humanos de las personas refugiadas y a la buena gestión de fronteras”, detalló el texto.

Los asistentes a la reunión reconocieron como prioridad el fortalecimiento de protección de personas refugiadas en la región, además de resaltar la necesidad de robustecer la capacidad a nivel regional.

Por otra parte, se coincidió en que todas las personas que huyen de situaciones de violencia y de persecución deben tener acceso “a un territorio seguro, al debido proceso y a procedimiento de refugio”.

Por ello, se coincidió también en la necesidad de reforzar a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) para hacer frente al aumento en las solicitudes de la condición de refugiado.

“México reafirma su compromiso por trabajar conjuntamente con las Agencias del Sistema de Naciones Unidas para garantizar el respeto irrestricto de los derechos humanos y las personas solicitantes de la condición de refugiado”, concluyó el texto.

Desde mediados de octubre de 2018 se registró un aumento inusitado en el número de migrantes, principalmente centroamericanos, que ingresan a México con el objetivo de llegar a Estados Unidos, lo que desató una crisis entre los dos países.

Más de 10.000 migrantes de Honduras, El Salvador y Guatemala, pero también de Cuba, Haití y diversos países africanos y asiáticos, ingresaron al país en varias caravanas a través la frontera sur y emprendieron la marcha hacia el norte.

Ante el aumento del número de migrantes irregulares y de solicitantes de asilo que llegan a Estados Unidos, el presidente de ese país, Donald Trump, amenazó el 30 de mayo pasado con imponer aranceles a todas las importaciones mexicanas.

El 7 de junio se anunció un acuerdo que prevé el envío de 6.000 efectivos de la Guardia Nacional de México a la frontera sur, entre otras medidas para contener la migración.

A cambio, Estados Unidos retiró la amenaza de los aranceles.

El acuerdo prevé un periodo de 45 días para evaluar el resultado de las medidas, y si EE.UU. estima que son insatisfactorios, los dos países entrarían en negociaciones para adoptar medidas adicionales. EFE

mqb/jmrg/eat

Anuncio