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En tremendo escándalo se convierte la boda de Chiquis Rivera y Lorenzo Méndez ¿Qué sucedió realmente?

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En un gran escándalo se convirtió la boda de Chiquis Rivera por causa del equipo de seguridad privada que contrataron para el resguardo de la ceremonia, pero al final arremetieron contra los medios que acudieron a la cobertura en la ceremonia eclesiástica donde se casó la hija de Jenni Rivera con Lorenzo Mendez, como en el rancho donde se celebraría la recepción.

Todo resultó ser un evento exclusivo y privado ya que ni sus fans, ni la prensa fueron invitados, a excepción de los reporteros del programa Al Rojo Vivo de la cadena Telemundo (Rodner Figueroa y Jessica Maldonado) y las cámaras de Suelta La Sopa.

Es por eso que a las afueras de la iglesia Westminster, en Pasadena, California, se dio el primer encontronazo entre la seguridad y la prensa que deseaba captar la llegada de la novia.

La seguridad gritaba y empujaba a la prensa para que no se acercara a la entrada del lugar.

Chiquis llegó en un Rolls Royce blanco y al bajarse fue cubierta con paraguas negros que la seguridad usó para protegerla y así obstaculizar los lentes de los medios.

Adentro, ya estaban los invitados y su familia, que llegó minutos antes del enlace matrimonial sin ofrecer comentario alguno.

Algunos invitados como Yanalté Galván, quien fue publicista de Jenni Rivera y de la misma Chiquis, compartió el momento al lado de la hija de la "Diva de la Banda" en este dia tan especial para ella.

“Me siento muy contenta de verdad. Conocí a la mamá, a toda la familia y sobre todo a ella desde que estaba muy pequeña, entonces yo creo que Jenni debe estar muy feliz”, dijo Galván.

La ceremonia inició un poco pasadas las dos de la tarde del sábado y duró unos escasos 40 minutos.

Para despistar a la prensa, tanto Chiquis como Lorenzo salieron por la puerta trasera sin dejarse ver de nueva cuenta ya que al parecer desean que todo se vea en la nueva temporada de su “reality show” en la cadena Universo.

¿Agreden a camarógrafo?

Después de la ceremonia eclesiástica, los novios y los invitados se fueron a festejar el momento en un rancho privado ubicado en el área de Sylmar, California.

Ahí, el equipo de seguridad del evento, continuaron en su deseo de no dejar trabajar a la prensa y uno de ellos se atrevió a empujar a un camarógrafo del programa de espectáculos “El Gordo y la Flaca” tirándolo al piso en plena carretera donde se expuso a casi ser atropellado por un auto.

Indefenso en el piso y en posición boca arriba, uno de los miembros de seguridad lo escupió en el rostro, en una acción deplorable que fue captada por los presentes y llevada de inmediato a las redes sociales donde se desató una lluvia de críticas. Sin embargo han surgido videos en los que se aprecia que el camarógrafo intentó golpear con la cámara al guardia de seguridad, quien reaccionó junto a sus compañeros.

Este detalle, hizo estallar, como es natural, la ira de los reporteros y camarógrafos que estaban cubriendo la llegada de los invitados a la fiesta y fue cuando llamaron a la policía. En el video se oye la voz de la reportera de El Gordo y la Flaca, María Hurtado, quien le pide a su camarógrafo Jorge que tenga cuidado.

Es así como en minutos, aproximadamente 10 patrullas del Sheriff y LAPD llegaron a poner orden y detuvieron a tres miembros del equipo de seguridad.

Los subieron a las patrullas y ahí los interrogaron.

Les dieron un “warning” (advertencia) de que no podían actuar de esa forma y el camarógrafo fue atendido por personal de los bomberos, mientras el momento seguía siendo captado por las cámaras presentes.

El camarógrafo, de nombre Jorge Ortega, llenó el reporte policiaco y comentó que en la semana levantaría cargos no solo contra la seguridad, que estaban armados, sino también contra miembros de la familia Rivera.

Entre tanto, en las redes sociales, Rosie Rivera, tía de Chiquis mostraba su malestar por lo sucedido y comenzó una lluvia de dimes y diretes con los seguidores que comentaban de manera positiva y negativa por todo lo sucedido con los elementos de seguridad y la manera cómo había actuado Juan Rivera ante la situación, pues hasta se atrevió a publicar el número telefónico personal de Raúl de Molina, con quien trae una disputa desde que De Molina hizo pública la invitación a la boda con la dirección y detalles de la misma.

Por su parte, Juan Rivera se atrevió a publicar en su cuenta de Instagram el número privado del Gordo Raúl de Molina, en reacción a las imágenes difundidas en las redes sociales. Luego el post de Juan Rivera con el número del presentador del programa de El Gordo y la Flaca fue retirado de Instagram.

Nadie de la familia de Chiquis, ni ella, ni Lorenzo, salieron a dar alguna declaración de lo que había pasado ya que fueron informados de lo que la seguridad había hecho.

Simplemente, hicieron caso omiso al reclamo por el trato a la prensa.

Algunas personas que estaban ahí afuera así hablaron del escándalo que se armó.

“No es justo lo que esta seguridad le hizo a la prensa, son unos bestias, cómo es posible que escupan y empujen a los camarógrafos”, comentó Isela Lopez, residente de Riverside, quien acudió como curiosa al evento.

Al final, Chiquis celebró en privado su boda, como ella lo quiso.

La prensa abandonó el evento con un mal sabor de boca.

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