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Mil millones: un preciado terreno de Beverly Crest sale a la venta por esa increíble suma

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En una cumbre sobre Beverly Hills, una extensa propiedad de 157 acres promocionada como la mejor parcela sin desarrollar de la ciudad de L.A., llega al mercado con el primer precio de venta de 10 cifras: $1,000 millones.

Se la apoda “la montaña”, y de manera apropiada. La superficie se encuentra en el punto más alto en el código postal 90210, y es, por una milla, el listado más caro en la historia de Los Ángeles.

Como referencia, una parcela de 120 acres propiedad del cofundador de Microsoft Corp., Paul Allen, está en el mercado en la misma área postal de Beverly Hills por $150 millones. En 2017, el magnate de bolsos Bruce Makowsky hizo olas cuando puso en el mercado su mega mansión de cuatro pisos en Bel-Air por $250 millones.

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Aaron Kirman, el agente a cargo, lo llama “la joya de la corona de Beverly Hills” y afirma que el potencial no tiene paralelo. Las vistas se extienden desde el centro de Los Ángeles hasta la isla Catalina, y el vecino más cercano está a 800 metros de distancia. Disneyland, con aproximadamente 85 acres, es un poco más de la mitad del tamaño de la propiedad.

Como se podría esperar de una montaña a la venta en Los Ángeles, la propiedad viene con una historia que se remonta a celebridades, magnates e incluso a miembros de la realeza.

El sitio fue propiedad de una hermana del difunto sha de Irán, la princesa Shams Pahlavi, que había planeado construir allí un espléndido palacio.

La propiedad fue adquirida más tarde por el presentador de programas de televisión -convertido en productor- Merv Griffin, quien encargó al destacado diseñador Waldo Fernández que creara una mansión de mármol y piedra caliza. Nunca fue construida. “Tendremos un helipuerto, un par de lagos y una casa estilo Palladio, como las que se ven cerca de Venecia [Italia] pero con una variación, porque necesitaremos mucho vidrio para las vistas”, dijo Griffin a The Times, en 1987.

Después de caer en problemas financieros, Griffin vendió la cima de la montaña por más de $8 millones, en 1997, a Mark Hughes, el difunto fundador de Herbalife, en un acuerdo que supuestamente estableció un récord de precios en ese momento para el sur de California.

“Es un sitio único”, dijo Jeff Hyland, un agente inmobiliario que manejó la venta de Griffin a Hughes. “Nunca habrá nada igual”.

Al igual que Griffin y la princesa, Hughes también tenía planes para desarrollar la propiedad para sí mismo. Sin embargo, murió en 2000, antes de que comenzara cualquier construcción.

El propietario actual es Secured Capital Property, de acuerdo con Ronald Richards, abogado y vocero de la compañía. Victor Franco Noval, hijo del filántropo Victorino Noval, figura como administrador de la LLC que es propietaria de dicha firma. El Noval mayor, que fue sentenciado a prisión federal en 2003 luego de declararse culpable de fraude y evasión de impuestos, no está asociado con la propiedad, según Richards.

Los terrenos están divididos en 17 parcelas. Seis de ellos, que van desde 2.5 acres a 12.2 acres, están divididos en zonas para desarrollo residencial. Uno se imagina a un desarrollador como curador de un enclave hiperexclusivo en lo alto de una colina llena de hogares que superan los $100 millones, pero Kirman cree que será para un comprador individual. “Hay 2,800 multimillonarios en el mundo”, dijo. “Nos dimos cuenta de que hay 100 de ellos que podrían y querrían comprar la propiedad”.

Una familia real de Medio Oriente o un multimillonario chino es lo que viene a su mente, y afirmó que ya la ha mostrado a algunos. Un interesado imaginaba un complejo unifamiliar, mientras que otro quería cultivar un oasis al estilo de Huntington Garden sobre la ciudad.

Con un presupuesto de marketing estimado entre los $400,000 y $1,000,000 o más, Kirman planea comenzar a volar alrededor del mundo para ofrecerla.

Paul Habibi, un profesor de bienes raíces de UCLA, dijo que el precio gigantesco es un reflejo del abismo de la desigualdad de la riqueza en Estados Unidos. “Miramos boquiabiertos esos precios, pero el inventario absoluto es tan limitado que pueden encontrar compradores para viviendas en el rango de los $100 millones”, afirmó. “Con $1,000 millones, pueden contarse con los dedos de una mano quiénes podrían pagar eso”.

“Prenderá fuego al mundo si se vende por mil millones”, destacó Tim Murphy, socio de Hall & Hall, una compañía de bienes raíces rurales que se especializa en terrenos y grandes propiedades de ranchos. “Ese puede ser el fin del mercado inmobiliario”.

Murphy agregó que la ubicación vende, y que ese lugar tan especial puede exigir mucho más. “A pesar de eso”, dijo, “es mucho dinero para un lote residencial sin desarrollar”.

En su experiencia, las propiedades de lujo tienen la mejor oportunidad de vender directamente desde el paracaídas. Si el precio no es correcto para empezar, languidecen en el mercado.

Murphy, cuyos clientes multimillonarios incluyen al propietario de los Rams, Stan Kroenke, no prevé que ninguno de ellos esté interesado. “[No], a menos que se coloque el nuevo estadio de fútbol de Los Ángeles encima”.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

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