Anuncio

Más de la mitad de los hogares ya no usan los teléfonos fijos

Share

El teléfono fijo - con cable rizado, sin cables, rotativo o con botones de plástico gruesos - solía ser un accesorio de los hogares estadounidenses.

Actualmente el 53.9% de los hogares estadounidenses dependen por completo de teléfonos celulares, según una encuesta del Centro Nacional de Estadísticas de Salud, parte de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.

El número es importante por la rapidez con que ha aumentado, según los investigadores que elaboraron esta encuesta. En 2006, solo el 15.8% de los participantes en el sondeo dijeron que no tenían un teléfono fijo. Pero al año siguiente aparecieron los iPhone y los Android y el abandono de la línea fija aumentó.

Anuncio

“Hay países en Europa donde entre el 80% y 90% de los hogares usan aparatos celulares, por lo que esta tendencia podría continuar durante algún tiempo”, dijo Stephen J. Blumberg, uno de los investigadores que compilaron el informe.

La encuesta se realizó en la segunda mitad de 2017 y sus resultados se dieron a conocer la noche del 13 de junio.

El cambio no es sorprendente por varias razones, según los expertos en telecomunicaciones, los celulares tienen mayor utilidad que los teléfonos fijos; la calidad del servicio celular y la conectividad se han vuelto cada vez más confiables; y muchas personas han crecido en la era de los teléfonos celulares y los planes de datos, así que nunca tuvieron que usar un teléfono fijo.

“La gente está eliminando ‘el cordón’ en todo”, dijo Brian Peterson, cofundador de Dialpad y ex jefe de ingeniería de Google Voice. “Si entras en tus 20 años y comienzas a pagar cuentas, lo último que vas a hacer es usar un teléfono fijo donde alguien solo podrá contactarte en casa”.

Por supuesto, hay algunas desventajas al abandonar la línea terrestre. Los teléfonos fijos han sido históricamente más confiables que los celulares, particularmente durante las emergencias. Muchos funcionan durante los cortes de energía, mientras que los inalámbricos requieren de una carga frecuente.

Pero los celulares pueden hacer cosas que los teléfonos estándar de línea terrestre no pueden, señaló Peterson.

Por ejemplo, los más modernos proporcionan a los usuarios más control sobre cuándo y cómo pueden ser contactados. Las personas pueden personalizar su configuración de “no molestar”, conectar un teléfono a múltiples números y redirigir las llamadas dependiendo de quién está llamando.

La encuesta del Centro de Estadísticas de Salud también encontró que los miembros de hogares con teléfonos celulares eran más propensos a participar en comportamientos riesgosos como fumar, beber en exceso, carecer de seguro de salud y conducir sin cinturón de seguridad, aunque la encuesta no profundizó en las razones.

Hace diez años, cortar un teléfono fijo en sí mismo se consideraba un riesgo mayor, dijo Blumberg, porque tenerlo se asociaba con la propiedad de la vivienda, la edad adulta y la estabilidad. “Ya no es el caso”, dijo.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

Anuncio