Hallan en un sendero a una niña muerta, dentro de una bolsa de lona. ¿Quién es ella?

El cuerpo de la chica estaba doblado, en una bolsa de lona negra; su cabeza y su torso sobresalían ligeramente. La habían arrojado en un terraplén, al costado de un sendero ecuestre popular, con algunos matorrales.

El cuerpo no había estado allí por mucho tiempo -menos de 48 horas- cuando una trabajadora del Servicio de Parques y Recreación del condado de L.A., que estaba despejando la zona en el sendero de Hacienda Heights, descubrió los restos, el martes por la mañana. Su diminuto cuerpo estaba vestido con una camiseta rosa de manga larga, con la inscripción “Future Princess Hero” (futura princesa heroína).

“Es un momento triste para el departamento y para la comunidad; vamos a hacer nuestro mejor esfuerzo para averiguar” qué le sucedió a la niña, aseguró el miércoles el sheriff Alex Villanueva, al lado de un bosquejo de la víctima.

Los investigadores siguen trabajando para determinar la identidad de la menor y la causa de la muerte. “Es una investigación por muerte sospechosa. No hay signos evidentes de violencia”, indicó el teniente de la división Homicidios del Sheriff, Scott Hoglund. “No tenemos idea de quién es esta niña”. La autopsia está prevista para los próximos días, informó.

La niña era negra, tenía entre ocho y 13 años, medía cuatro pies y cinco pulgadas, y pesaba solo 55 libras. No había signos visibles de malnutrición o maltrato. Aparte de la camisa rosa, llevaba pantalones blancos y negros, pero estaba sin zapatos.

El sendero se encuentra a un corto trayecto en automóvil hacia las colinas, al sur de la autopista de Pomona. El cuerpo fue encontrado en la parte inferior de un terraplén, al este de la cuadra 3400 de Hacienda Boulevard.

Según Hoglund, es probable que alguien haya visto algo entre la tarde del domingo y el martes por la mañana, cuando encontraron su cuerpo. “Hay un carril extra en Hacienda Boulevard, al sur de Colima Road”, dijo.

También destacó que el cadáver fue encontrado a unas 120 yardas del comienzo del sendero. Sus detectives no saben si alguien dejó caer la bolsa en ese lugar, o si fue empujada desde el terraplén.

“En este punto, no tenemos ninguna pista”, indicó Hoglund. “Estamos buscando cualquier tipo de testigos que hayan estado en esa área, que hayan visto un vehículo detenido a un lado. Buscamos cualquier pista”.

Un dibujante del departamento produjo un identikit de la niña, con la esperanza de que alguien la reconozca.

Los investigadores se han acercado al Departamento de Servicios para Niños y Familias del Condado de Los Ángeles, a grupos de menores desaparecidos y distritos escolares en toda la región, precisó Hoglund.

Una revisión hecha por Los Angeles Times de los homicidios de niños en 2016 encontró que hubo más de 400 casos desde el 1º de enero de 2000 en todo el condado de L.A. Muchos de los menores eran víctimas de abuso o violencia en sus hogares, y la mayoría perecieron en hogares de padres o tutores.

Dan Scott, un sargento retirado del Sheriff del Condado de L.A., que estuvo involucrado en docenas de investigaciones de maltrato y muerte de chicos, expuso que las circunstancias en este caso son inusuales. “Es extremadamente raro ver el cuerpo de un niño abandonado”, afirmó. “No puedo recordar ninguno en los últimos años en la región”.

Conforme Scott, incluso cuando un familiar mata a un menor, el atacante a menudo entierra u oculta el cuerpo.

Mientras definió la muerte de la pequeña como ‘una horrible tragedia’, Hoglund dijo que “estos son los casos más difíciles de manejar”, y que no está claro si la pequeña estaba viva o ya había fallecido cuando fue colocada en la bolsa.

Hoglund evitó decir si los técnicos forenses recuperaron huellas dactilares o ADN de la bolsa, algo que podría darles pistas sobre la identidad de la víctima o la persona que arrojó su cuerpo allí. Este miércoles, los investigadores instauraron la confidencialidad en los registros del juez de instrucción en la investigación, una medida que impide su revisión pública.

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