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Presentan cargos a manifestantes que atacaron a miembros del KKK en Anaheim

Un hombre del Ku Klux Klan (izq.) pelea contra un manifestante por una bandera de los EE.UU., luego de que miembros del KKK intentaran realizar una marcha en Pearson Park, Anaheim, en febrero pasado. Siete de los manifestantes fueron ahora acusados de atacar a los miembros del Klan.

Un hombre del Ku Klux Klan (izq.) pelea contra un manifestante por una bandera de los EE.UU., luego de que miembros del KKK intentaran realizar una marcha en Pearson Park, Anaheim, en febrero pasado. Siete de los manifestantes fueron ahora acusados de atacar a los miembros del Klan.

(Luis Sinco/Los Angeles Times)
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Siete manifestantes fueron acusados de atacar a miembros del Ku Klux Klan durante una marcha denominada ‘White Lives Matter’ (las vidas blancas importan), que se volvió un sangriento combate cuerpo a cuerpo en Anaheim a comienzos de este año, afirmaron los fiscales este jueves.

Los manifestantes fueron acusados por delito menor de asalto o agresión, o por resistencia a la autoridad, según un comunicado emitido por la oficina del fiscal de distrito del condado de Orange. “Este caso no se trata de quién estaba realizando la marcha, ni de su mensaje racista, o de quién se manifestó en contra de ello. Esto se trata acerca de la mentalidad de violencia de la multitud, que bloqueó las calles del vecindario, el acceso al parque, y puso en peligro a la comunidad en su conjunto”, afirmó en el comunicado el fiscal del distrito del condado de Orange, Tony Rackauckas. “Nuestra oficina no tolera ningún mensaje de odio, violencia callejera o justicia por mano propia”.

La noticia de que un pequeño grupo de miembros del Klan planeaba organizar una marcha en Pearson Park atrajo al lugar a una gran multitud de manifestantes opuestos, el 28 de febrero pasado. Más de 50 personas llegaron al parque cerca de las 10 a.m. y pasaron dos horas hablando contra el racismo, la brutalidad policial y otros temas, durante lo que comenzó como un evento pacífico. Pero el caos irrumpió apenas siete miembros del Klan llegaron al sitio, al mediodía.

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Los manifestantes se arremolinaron entorno a los miembros del Klan, lo cual desencadenó una serie de peleas a lo largo de West Cypress Street. Tres personas fueron apuñaladas y rastros de sangre tiñeron la acera, junto al vehículo del miembro del KKK.

Los siete acusados son: Hugo Contreras, de 28 años y residente de Hawthorne; Randy Felder, de 26 años, residente de Lakewood; Guy Harris, de 20 años, quien vive en Anaheim; Mark Liddell, de 26 años, con residencia en Los Ángeles; Armando Ortiz, de 22 años, quien reside en Santa Ana; Nicole Schop, de 24 y oriunda de Los Ángeles; y Alexis Solis, de 23, quien fue identificada como transeúnte.

Los fiscales señalaron que Ortiz fue uno de los apuñalados. Él y Harris supuestamente peleaban contra uno de los miembros del Klan, identificado sólo como “Charles D.”, cuando Ortiz fue acuchillado bajo el brazo con una navaja de bolsillo, según la nota de la oficina del fiscal de distrito.

Los fiscales siguen buscando a un octavo sospechoso, a quien se ve atacando a patadas a un miembro del Klan en un video del incidente.

Hasta el momento, la policía de Anaheim detuvo al menos a uno de los miembros del KKK, a quien se escucha decirle a un policía que “lo apuñaló en defensa propia”, mientras el hombre atacado sangraba en un callejón cercano. Sin embargo, hasta el momento no ha sido acusado de ningún delito.

Los testigos señalaron que los miembros del Klan emplearon la punta de un asta de bandera como arma durante la pelea con los manifestantes. La policía informó que también se utilizaron navajas.

Thomas Kielty, abogado que representa a Contreras, Schop y Liddell, aseguró que sus clientes estaban simplemente tratando de detener a un miembro del Klan que había apuñalado a uno de los manifestantes.

Kielty fue una de las tantas personas que, en ocasiones anteriores, había criticado la respuesta del Departamento de Policía de Anaheim ante la marcha. Pese a tener conocimiento previo del polémico evento, el departamento al parecer no contaba con servicio de sus oficiales en el parque en la mañana del incidente. Un video del momento muestra a patrullas de la policía de Anaheim arribando al lugar minutos después de que se reportaran las puñaladas.

“Mis clientes no estaban allí cuando ocurrió; ellos ya habían comenzado a retirarse cuando al parecer se desató el infierno. Vieron gente herida, sangrando, en el suelo”, aseguró Kielty a Los Angeles Times este jueves. “La gente decía que miembros del KKK habían apuñalado a estos manifestantes, y que la policía estaba allí casi charlando con estos hombres”

Anteriormente, Kielty había dicho a The Times que Contreras, uno de sus clientes, había sufrido una fractura en el brazo mientras la policía lo detenía.

El vocero de la policía de Anaheim, el sargento Daron Wyatt, se negó en varias oportunidades a decir cuántos oficiales estaban en el lugar ese día, o a comentar directamente sobre el manejo que el departamento tuvo del hecho. “Aquí hubo personas que vinieron específicamente a cometer actos de violencia, y no hay nada que hacer para detener eso”, había declarado a The Times en febrero.

Los cargos se conocen días después de que una concentración similar terminara en violencia en Sacramento. Miembros del Partido Tradicionalista Trabajador, una agrupación nacional separatista blanca, y los Golden State Skinheads, un conocido grupo de supremacía blanca en California, fueron atacados por manifestantes en las cercanías del Capitolio el 25 de junio pasado, según detalló la policía. Durante los incidentes siete personas fueron apuñaladas y otras nueve resultaron heridas. Hasta el momento no hay arrestados.

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