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Netflix, exalcaldes de NY y LA, y hasta Walmart en la lucha por el control de la Junta Escolar de LA

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Si las elecciones de la Junta Escolar de Los Ángeles fueran una película, entonces el candidato a mejor actor de reparto podría ser un individuo que hasta ahora había recibido poca atención: Reed Hastings.

En base a los documentos revisados por The Times, el cofundador de Netflix contribuyó cerca de $5 millones de dólares desde septiembre pasado a los defensores de la Asociación de Escuelas Charter de California (CCSA, por sus siglas en inglés), un conducto importante de fondos para los candidatos a la Junta Escolar respaldados por los partidarios de dichas entidades educativas. Su contribución más reciente, realizada el martes, fue de $1 millón de dólares.

Otro importante contribuyente reciente es un nombre familiar en la política de la educación, Eli Broad, quien invirtió $400,000 el viernes pasado, además de otros $50,000 que aportó en noviembre.

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Los sindicatos de maestros y sus aliados, incluyendo a otros grupos laborales, también están desembolsando mucho dinero e igualan dólar por dólar al lado pro-charter en una de las contiendas.

El principal jugador externo de ese bando es la Federación Estadounidense de Profesores, un sindicato nacional encabezado por Randi Weingarten, que hasta ahora ha informado aportaciones de alrededor de $1.2 millones.

Si predominan los partidarios de las charter, podrían ganar su primera mayoría en la Junta Escolar del segundo sistema escolar más grande del país. Estos partidarios apoyan a Kelly Gonez para la bancada que estará disponible próximamente en el Distrito 6, en el este del Valle de San Fernando. El gasto externo en nombre de Gonez ascendió a aproximadamente $2.1 millones hasta este miércoles, según los documentos presentados ante la Comisión de Ética de la Ciudad de Los Ángeles.

Maestros Unidos de Los Ángeles (UTLA, por sus siglas en inglés) apoyan a Imelda Padilla, quien en la contienda se ha beneficiado de los $2.14 millones de dólares de desembolso externo.

En el Distrito 4, que se extiende desde el lado oeste de L.A. hasta el oeste del Valle, los defensores de las charter respaldan a Nick Melvoin, quien desafía al titular de dos términos -y candidato del sindicato- Steve Zimmer, actual presidente de la Junta Escolar. El gasto externo para Melvoin superó los $4.25 millones; mientras que para Zimmer fue de $2.16 millones. Ambos candidatos respaldados por las charter han recaudado más dinero para sus propias campañas del que han reunido sus rivales.

Las charter son escuelas públicas, administradas de forma privada, que están exentas de algunas de las reglas que rigen a los campus tradicionales. La mayoría de ellas no están sindicalizadas.

Los defensores de la CCSA pueden utilizar las donaciones para cualquier objetivo político, pero la contienda a la Junta Escolar de Los Ángeles, la más cara de la nación, ha sido su proyecto principal.

Además de tener dinero, Hastings es un donante conveniente para el bando de las escuelas charter en la California de izquierda y ha sido un contribuyente regular y confiable, tanto para los candidatos como para las causas demócratas. Ese es un atributo valioso dado el clima político del estado en contra de Trump, que ha convertido en un objetivo central la posibilidad de aumentar el número de escuelas charter.

Al igual que la secretaria de Educación de Trump, Betsy DeVos, Hastings es un reconocido y ferviente defensor de las charter y un importante donante a sus causas (el gobernador de California, Jerry Brown, también apoya las charter, aunque no como un colaborador de gran capital).

El sindicato de maestros coloca a los donantes como Hastings en el papel de los multimillonarios externos que intentan comprar una elección local. Hastings ha insistido en que simplemente quiere apoyar medidas significativas para mejorar la educación pública.
La etiqueta de “externo” también se aplica a algunos otros donantes, muchos de ellos especialmente asociados con la política conservadora o antisindical, o ambas.

Desde el pasado septiembre, los principales donantes partidarios de la CCSA incluyen a:

  • El exalcalde de Los Ángeles Richard Riordan: $1 millón (Riordan aportó otro millón a una segunda campaña aliada para derrotar a Zimmer)
  • La cofundadora de Conservative GAP, Doris Fisher: $1.05 millones
  • El heredero de Walmart Jim Walton: $500,000
  • La filántropa Laurene Powell Jobs (cuyo difunto esposo, el fundador de Apple, Steve Jobs, estaba firmemente en contra de los sindicatos): $250,000
  • El exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg: $200,000
  • La heredera de Walmart Alice Walton: $200,000

El grupo charter presenta un informe oficial de gastos y donantes dos veces al año, pero algunas donaciones salen a la luz antes debido a las reglas vigentes de divulgación en elecciones particulares. Las mismas reglas captan la mayor parte del gasto del sindicato, cuya porción más generosa proviene de los sindicatos de maestros.

Maestros Unidos de Los Ángeles terminó 2016 con unos $366,000 en un comité de acción política establecido para apoyar a sus candidatos, según los documentos públicos. El sindicato también contaba con $286,000 en un fondo para mensajes de “cuestiones”. Ese último fondo fue aprovechado para entregar volantes con mensajes como “Gracias Steve Zimmer por el día de recuperación del estudiante”.

La publicidad de cuestiones no puede hacer referencia a una elección o a una fecha de elecciones. Tampoco puede presionar a los electores a votar de una determinada manera. Pero existe un claro beneficio político para los candidatos respaldados por el sindicato.

UTLA también recopila un promedio de $9.50 al mes del 22% de sus 32,000 miembros que han accedido a contribuir, lo cual arroja un total de aproximadamente $67,000 al mes desde enero, detalló el director político del sindicato, Oraiu Amoni. Este dinero se divide aproximadamente en una proporción de 60-40 entre los candidatos y los mensajes de cuestiones varias.

La semana pasada, los miembros del sindicato votaron a favor de pedir prestado $500,000 de su fondo de huelga para este tipo de mensajes. Las deudas anteriores al fondo de huelga no se pagarán hasta 2020, según Amoni.

UTLA también está gastando una cantidad menor -aunque no divulgada- como parte de una campaña de medios llamada “We Are Public Schools”, que incluye vallas publicitarias con mensajes positivos acerca de las escuelas públicas. Algunas de ellas cuentan con imágenes de Zimmer o Padilla.

Además de la Federación Estadounidense de Profesores, otros sindicatos han invertido dinero para esos candidatos, en particular la Asociación Nacional de Educación, con un aporte de $700,000 y la Asociación de Maestros de California, con $250,000.

Traducción: Diana Cervantes

Si quiere leer este artículo en inglés, haga clic aquí

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