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Dos policías de L.A., son acusados por encubrimiento y mentir en su reporte

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Dos oficiales del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) fueron acusados por encubrir un accidente donde se involucra a un conductor que manejaba bajo la influencia de una sustancia, además de mentir en el reporte de policía, dijeron los fiscales.

Siguiendo una investigación interna de la agencia, los oficiales René Ponce e Irene Gómez fueron acusados el 6 de septiembre por mentir y llenar falsamente un reporte de policía; además de conspirar en un acto que perjudica al público, de acuerdo a la oficina del fiscal del distrito del Condado de Los Ángeles. Ambos policías se declararon no culpables.

Los dos oficiales estaban patrullando el área de la División de Hollenbeck, en Boyle Heights, el 26 de octubre de 2014, cuando fueron mandados al lugar de un accidente ocurrido en la cuadra 3,000 del East Side blvd.

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Los fiscales dijeron que un conductor intoxicado había chocado con dos vehículos estacionados, pero los policías optaron por no realizar una investigación al conductor que conducía bajo la influencia del alcohol (DUI, por sus siglas en inglés).

En el reporte, Ponce, de 39 años, y Gómez de 38, mintieron y escribieron que el conductor escapaba de la escena, de acuerdo a los documentos archivados en la Corte Superior del Condado de Los Ángeles.

Lo que sucedió fue que los dos policías subieron al conductor a la patrulla y lo llevaron a su casa, en un complejo de apartamentos, diciéndole que se durmiera, según los fiscales. Al momento del incidente, Gómez llevaba tres años trabajando para el departamento y Ponce 13.

El abogado defensor que representa a Gómez, Ira M. Salzman, reclamó a la fiscalía del por qué había tomado cerca de dos años para hacer los cargos contra su cliente, a quién calificó como una policía muy dedicada de su trabajo.

“Mi cliente tiene antecedentes impecables, con una excelente reputación de honestidad y de decir la verdad”, Salzman, indicó. “Ella es muy respetada entre sus colegas”.

El abogado de Ponce, Bill Seki, no respondió a los comentarios que se le solicitaron.

Si los oficiales son encontrados culpables, cada uno pudiera pasar tres años en una cárcel del condado.

El conductor no fue acusado del delito. No está claro hasta el momento, que relación pudiera haber entre el conductor con alguno de los policías.

“No estamos seguros si hay una conexión entre los oficiales y el supuesto individuo que manejaba”, dijo Shiara Davila-Morales, vocera de la fiscalía.

Si desea leer la nota en inglés, haga clic aquí.

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