Una demanda alega que un director de Pasadena amenazó con llamar a los agentes de inmigración para delatar a una madre y una niñera

Una mañana, hace dos años, la niñera Eva Del Río fue a dejar al pequeño que tenía bajo su cuidado a la escuela Madison Elementary, en Pasadena, la misma institución K-5 donde había enviado a sus propios hijos.
Cuando tocó la puerta de una entrada cerrada del campus, el director, Juan Ruelas, maldijo, y amenazó con reportarla a la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) si intentaba golpear la entrada otra vez, relató. “Me sentí discriminada, humillada”, aseguró este martes, en español. “Sentí dolor”.

Del Río es una de las cinco personas que demandaron al Distrito Escolar Unificado de Pasadena, alegando que Ruelas violó la cláusula de protección igualitaria de la Decimocuarta Enmienda y que el distrito no cumplió con las leyes contra la discriminación al no investigar una denuncia formal en contra del directivo.

La demanda, presentada este martes en el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles por los abogados del Fondo México Americano para la Defensa Legal y la Educación (MALDEF, por sus siglas en inglés), afirma que el distrito “tuvo conocimiento real del acoso” y que “actuó con indiferencia deliberada”.

Este martes, Ruelas no respondió a las repetidas peticiones de comentarios por parte de este periódico, y una portavoz del Distrito Escolar Unificado de Pasadena se negó a efectuar declaraciones.

Ruelas llegó a Madison en 2015 y dejó el cargo el pasado junio. Su mandato en la escuela fue problemático. Mucho personal renunció durante su permanencia allí, y se enfrentó a acusaciones de engaño. Los padres de familia emprendieron una campaña para su despido El periódico Pasadena Star-News informó que dos abogados locales habían prometido donar $20,000 a Madison si el distrito destituía al director.

Cuando Ruelas fue finalmente apartado de su cargo, se convirtió en el nuevo director del Departamento de Evaluación y Desarrollo del Lenguaje del distrito.

Los demandantes y sus abogados afirman que el problema va más allá del propio Ruelas. “No estamos hablando sólo de un director problemático”, aseveró Juan Rodríguez, abogado de MALDEF a cargo del caso. “Estamos hablando de un distrito escolar que se sigue haciendo la vista gorda”.

Al igual que muchos otros distritos escolares en California, el Distrito Escolar Unificado de Pasadena ha prometido, en un momento de mayor ansiedad por el aumento de los controles inmigratorios, mantener a todos los estudiantes a salvo, independientemente de su estatus legal. El pasado diciembre, tras la elección del presidente Trump, el distrito aprobó una resolución para prohibir que los agentes del ICE registren los distritos escolares sin una orden judicial.

Un día después del encuentro de Del Río con Ruelas, una madre latina, identificada en la demanda sólo como Jane Doe, presuntamente se reunió con el director para quejarse de que la escuela descartaba demasiado rápido los almuerzos no consumidos de los niños. La mujer sostiene que, cuando le dijo a Ruelas que presentaría una denuncia formal en contra de la escuela si él no abordaba estas preocupaciones, el director amenazó con enviar al ICE a la escuela; luego se río de ella y se alejó.

Ese septiembre, la madre contó su historia a la Junta Escolar en una reunión pública, y presentó una denuncia formal ante el distrito, alegando discriminación basada en la raza. En octubre, la oficina de recursos humanos del distrito decidió que la queja no era un asunto del distrito y la remitió a Ruelas, detalló.

En una reunión posterior, a la cual la madre asistió junto con un representante del distrito y Ruelas, el representante le dijo que estaba “difamando” al director. Ella se sintió intimidada y consideró que el distrito estaba implícitamente amenazando con demandarla para impedir que diera a conocer las amenazas del funcionario.

A la madre, quien durante mucho tiempo había sido voluntaria en la escuela, también se le indicó que ya no podría ayudar con los programas escolares porque Ruelas no la quería en el campus.

Según una página de Facebook, los padres se organizaron para apoyar a esta madre antes de su presentación en una reunión de la Junta Escolar, realizada en diciembre. En ella, una vez que la madre habló sobre la presunta amenaza y la respuesta del distrito, una ayudante de la escuela afirmó públicamente que quería reportarla al ICE, especifica el pleito. Esa declaración no fue abordada, según la denuncia.

“Esto no es normal, es algo feo”, expresó Del Río este martes, acerca de las amenazas que ella y otros alegan haber sufrido. “No debe ocurrir nunca más”.

Traducción: Diana Cervantes

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