Anahí es atacada en las redes por promover en exceso un supuesto acto de caridad

Según ella, lo que estaba haciendo era algo completamente natural y digno de los mayores elogios, por lo que decidió usar su cuenta de Instagram para darlo a conocer a través de una serie de imágenes que empezaron casi de inmediato a despertar la burla de muchos usuarios.

Las fotos muestran a Anahí Puente Portilla, exintegrante de la tristemente célebre agrupación RBD, mientras acompaña a su esposo, el gobernador de Chiapas Manuel Velasco, durante un evento benéfico en el que fueron donaron auxiliares auditivos para niños desfavorecidos del estado en el que ambos radican.

En esas tomas se ve a la cantante y actriz abrazando no solo a su marido, sino también teniendo gestos de aparente cariño con los menores de edad, lo que ha despertado el disgusto de los visitantes de internet que no se han creído el cuento y que han manifestado su opinión empleando las mismas redes sociales.

“Qué ridícula y falsa eres”, comentó uno de ellos. “La gobernadora @anahi y la primera dama Manuel Velasco jaja #meduelesmexico”, dijo otro. Pero también hubo críticas más razonables, como la de la usuaria que colocó: “No hablo mal de ella, si no del juego mediático en el que está participando con su actual esposo… soy mexicana y quiero un país NO corrupto, y que estas cosas auditivas para mi población no sean un privilegio tenerlas, si no una obligación”.

No cabe duda de que el rechazo a Anahí se relaciona de algún modo a su pasado artístico dentro de la escena mexicana más plástica, pero estamos seguros también de que no se limita a ello, sino que se extiende a las actividades en que ella misma se ha encontrado metida en tiempos recientes, como acudir a un evento oficial en Chiapas (el estado más pobre del país) luciendo un traje de 6 mil dólares y estar ahora involucrada con el Partido Verde Ecologista de México, atado al PRI y promotor de campañas a favor de la pena de muerte y en contra de los derechos de la comunidad LBGT.

La misma dama acaba de responder ya a los mensajes aludidos, y como era de esperarse, lo hizo con un cuidado que no por ser políticamente correcto resulta necesariamente sincero. “Los adoro, están siempre en mi corazón y en mi vida. Sé que cada uno tiene una opinión. Creo fielmente que nuestras palabras hacia los demás solo hablan de quienes somos nosotros mismos (…). Arriba o abajo del escenario, siempre pueden estar seguros de que pongo todo mi corazón en cada cosa que haga (…). Nuestro mundo necesita mucho amor”. Sí, por supuesto; y necesita también muchas cosas más.