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Kat DeLuna regresa más latina que nunca y dispuesta a marcar huellas

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Aunque su nombre es Kathleen Emperatriz, hace diez años cuando se lanzó al ruedo musical, el mundo la conoció como Kat DeLuna. Al principio, muchos dudaron que se tratara de un estrella con raíces latinas. De hecho, el ser hispana, le presentó ciertos obstáculos para incursionar con facilidad con la propuesta que estaba ofreciendo. Pero más pudo su arte y estilo, que los esterotipos y prejuicios que la acompañaban, pues terminó convirtiéndose en todo un suceso musical.

Kathleen le da mucha importancia al nombre que le ponen a una persona, sobre todo si es un hijo. Cree que eso va a determinar su vida y cómo será visto por el mundo. Dice que sus padres le pusieron Kathleen que significa “pura” y Emperatriz que significa “emperadora” con lo que ella es una “Emperadora Pura” DeLuna, nacida en El Bronx para el mundo. “Pero me crié entre la República Dominicana y Newark (New Jersey)”, señala con orgullo.

La República Dominicana, una isla llena de energía, hogar del merengue y la bachata. Tierra de estrellas como Juan Luis Guerra y José Alberto “El Canario”, fue el lugar donde Kat y sus hermanas vivieron de niñas hasta que tuvieron que enfrentar el divorcio de sus padres que luego las llevó hasta Newark donde ella, sus hermanas y su madre no les quedó más remedio que empezar de nuevo en un entorno rodeado de malas influencias, peligros, delincuencia, pero también de mucho arte, sueños y pasiones.

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“Aunque mis padres no estaban juntos, siempre me impulsaron y me dijeron que yo puedo llegar hasta donde quiera. Y desde temprana edad encontré el amor por la música y ellos se dieron cuenta. Pienso que no importa dónde uno esté, si tu familia tiene una buena formación. Desde muy pequeña me enseñó que debo ser muy trabajadora. Ella (mi madre) vino a Estados Unidos con tres niñas, siempre estuvo positiva. Ella había tomado una sola clase de reportería en Santo Domingo y aquí se puso a hacer bizcochos y nosotras los vendíamos en el parque. 20 años después, ella es la propietaria de la pastelería de bizcochos más importante de New Jersey”, cuenta con emoción.

Ese ejemplo de su madre, impulsó a Kat a tomar un rumbo en la vida y a pesar de estar viviendo en un barrio peligroso y carente de oportunidades, tomó una de las muy escasas que ofrecía el entorno y se puso a estudiar en la escuela secundaria de las artes de Newark, la misma donde asistieron famosos como Whitney Houston, Sarah Vaughan, Savion Glover, Tisha Campbell-Martin y el salsero Frankie Negrón. “Pero no te voy a negar que crecer en Newark fue un poco más duro, pero valió la pena porque me hizo una mujer muy fuerte, que vé con una sonrisa los obstáculos de la vida. Hoy me doy cuenta que muchos de los muchachos con los que estudié están muertos o se han perdido en la vida, pero yo busqué salir adelante a pesar de todo”, recuerda.

La separación de sus padres tampoco fue un obstáculo. Su papá fue muy violento y esa fue una de las causas del rompimiento de su hogar, al igual como ocurre en muchas familias latinas, pero ella dice que a pesar de todo y con el paso del tiempo aprendió a perdonar. “Mi papá no estuvo muy presente fisicamente en mi niñez, pero siempre nos llamó. Mi mamá se convirtió en mi mejor amiga y en la de mis hermanas”, expresa esta joven cantante.

Desde temprano descubrió su amor por la ópera y la música clásica y cuando aprendió a interpretarla, desarrolló habilidades vocales que no sabía que poseía. A los 12 años de edad ganó un concurso de karaoke local interpretando “I Will Always Love You”, de Whitney Houston y desde ese momento capturó la atención de la gente, incluido el cantante de salsa Rey Ruiz, quien le aconsejó comenzar a componer su propia música. “Whitney es de Newark, su madre vivía a 20 minutos de donde yo vivía, toda su familia estaba allá. Y el ver que ella logró su sueño, a pesar de los obstáculos en el camino, eso me hacía verla como un ídolo y una inspiración para lograr los míos”, recuerda con emotividad.

Aunque hoy en día los hispanos tienen una gran influencia en la música a nivel mundial. Hace 11 años cuando pretendía buscar un lugar en la música, Kat tuvo que luchar muy duro para que su propuesta sea aceptada en el mercado anglo.

En el 2006, Shakira estaba lanzando “Hip’s dont lies” y ya en el mercado anglo estaba sonando “Gasolina” de Daddy Yankee, estos dos temas eran los que los americanos escuchaban en las emisoras para ese momento, el resto era invisible ante sus ojos.

“Ser latina fue un poco un obstáculo, pero ese obstáculo fue para mí una bendición porque me permitió animar mi sonido musical. Me decían que no conocían mucho de la música latina, pero yo les aclaré que también era americana y que el tener sangre latina no necesariamente tenía que ponerme frutas y rosas en la cabeza. Yo formaba parte de una nueva generación y como mi personalidad es muy rebelde, recuerdo que estando en Sony (Epic Records) me encerré en el estudio de grabación con mi productor RedOne (ambos estábamos comenzando) y dijimos ‘vamos a hacer todo un sonido americano, pero con influencia latina’. Con eso quería demostrarles que a pesar de ser latina podía hacer un sonido americano y más viniendo de Newark, New Jersey, de donde viene Whitney Houston y con el tipo de vocal que tengo, de esa manera fue que surgió el éxito ‘Whine Up’”, dice sobre este tema musical que se convirtió en el sencillo más vendido en iTunes Latino, que alcanzó el número 1 en Francia y ganó el premio MTVtr3 como “Mejor Nuevo Artista”.

Con RedOne a su lado y firmada por Epic Records, Kat unió fuerzas con este entonces desconocido productor que hoy día ha trabajado con estrellas como Lady Gaga y Nicki Minaj. “Cuando todos los latinos escucharon esta propuesta lo vieron como una recopilación de los que nosotros oíamos, pero para los americanos se trataba de un sonido nuevo. Lo que se me presentó como un obstáculo, terminó siendo para mí una bendición”, explicó.

Deluna luego co-escribió todas las canciones de su álbum debut “9 Lives”, incluyendo el sencillo “Run The Show” con Busta Rhymes, que alcanzó el No. 2 en el “Billboard” Dance. Y alcanzó el Top 10 en varios países. Luego grabó una versión en español de este tema junto a Don Omar.

Se convirtió en la primera estrella de pop estadounidense internacional de descendientes dominicanos. Es decir, en la primera estrella pop internacional dominicana, lo mismo que ha logradao Jennifer López para Puerto Rico, Shakira para Colombia, Gloria Estefan para Cuba, Thalía para México y lo alcanzado por Selena en el regional mexicano. “Y yo admiro a las mujeres que rompen barreras, como también lo hizo un día Iris Chacón, Beyonce que no les importó frenarse un poquito para luego salir adelante con lo que ellas creen”, señala.

Poco después, DeLuna lanzó un álbum internacional que ofreció el hit “Drop It Low” que rápidamente se convirtió en un #1 en la lista Billboard Dance. Después de meses de trabajar en el estudio en la primavera de 2015, DeLuna lanzó su sencillo “Bum Bum” con R&B crooner Trey Songz. En el 2016 lanzó otro éxito titulado “What a night” con la sensación internacional de R&B, Jeremih. “What a night” es una interpretación del sencillo original “December 1963 (oh what an night)” que fue lanzado en 1975. “What an night” alcanzó la posición número 25 en las listas de R & B en Estados Unidos.

Pero lo más increíble que logró la posición número 1 en las listas de R&B de Japón y formó parte del EP japonés de DeLuna titulado “Loading”, que se estrenó el 7 de octubre de 2016 y se convirtió en el álbum número uno de R&B en Japón, a pocas horas de su lanzamiento. “Eso fue hace poco. Te cuento que yo estaba volando y llegué a Japón de promoción y al llegar me dijeron. ‘Niña este álbum está de número 1 en menos de tres horas de haber salido. Se trataba de un álbum en inglés hecho por una latina y eso me llenó de orgullo. Yo soy dominicana y soy latina pura. Se siente tan bello y a veces quiero llorar cuando me doy cuenta que puedo mostrar a toda una raza que los sueños son posibles”, expresó.

Hoy Kat trabaja en los toques finales en su próximo EP “ViVa Out Loud” junto a sus productores favoritos, entre ellos Red One, para ofrecer una propuesta que buscará recuperar el mercado de Estados Unidos y el corazón de su gente latina, incluidas las jovencitas que crecen en un entorno lleno de dificultades y que la hoy la ven como una inspiración. “Para mi es una gran responsabilidad el poder mostrar a los jóvenes que todo es posible. Gracias a Dios hoy hay más humildad en la humanidad, lo creas o no. Hace poco iba de camino al estudio en Nueva York y siete niñas entre 8 a 19 años de edad me pararon y lo que más me tocó es que eran latinas de Nueva York y me dijeron que lo que más les gustaba de mi es que siempre he mantenido mi cultura. Pero lo mejor, es que lo hablamos en español. Eso me dio orgullo”, confesó al artista que podría estar incluyendo un tema en nuestro idioma en su nuevo proyecto.

“Yo sé que mi voz no sólo significa tener una canción en el club o un número uno en la radio. Sé que mi voz me va a permitir irme de gira por el mundo entero para poder influenciar a todos los que me oyen, incluida una muchacha en África que está trabajando duro, a la que puedo decirle ‘no te apures, si tiene sueños y metas, puedes lograrlas’. Para mí se siente muy bello y reconozco que esa es una responsabilidad con la que me levanto todos los días, porque si hoy lo que tengo, puedo perderlo, también es cierto que como subí, puedo bajar. Lo más importante es tener integridad y enseñar a los otros a hacer lo mismo”, concluyó.

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