María Raquenel abre escuela artística en L.A. sin olvidarse del pasado

Pese a que estuvo seis meses en Miami para grabar la más reciente temporada de la telenovela de Telemundo “Eva la trailera” y antes de eso recorrió México, Estados Unidos y Perú a lo largo de cuatro meses con la obra “Monólogos de la vagina”, María Raquenel Portillo vive desde hace cuatro años en Los Ángeles, y es aquí (más precisamente, durante una visita a la redacción de HOY) donde nos anunció su inminente debut en la televisión en inglés con un ‘reality’ que saldrá al aire probablemente en septiembre, pero del que no puede todavía adelantar nada.

Lo que sí puede hacer es hablar del futuro inmediato de “Eva”, donde interpreta a Rebeca, una mujer que, pese a ser una villana, tiene para ella “un gran lado humano, porque actúa así debido a que su mamá la tiró al bote de basura al nacer, por lo que tuvo que crecer entre la calle y distintas casas. Nunca ha conocido el amor, por lo que se alía con las únicas personas que la están tomando en cuenta, aunque sea para hacer maldades”.

Pese a lo dicho, Raquenel asegura que no le gustan las producciones televisivas que abusan de la violencia, porque considera que ahora la gente está actuando inspirada por lo que ve en la pantalla chica en lugar de que la misma pantalla chica se inspire en la realidad. “Por eso pasan cosas como lo de Orlando”, se atrevió a decir. “Yo de chica soñaba con los cuentos, con Blancanieves, con las historias rosa de que iba llegar un príncipe azul, y prefiero eso a las historias violentas”.

Por el momento, tiene varios planes en el Sur de California: fuera de la presentación que ofrecerá este 24 de junio en el Alex Theatre de Glendale como parte del espectáculo “Vaselina El Musical USA”, donde interpreta a una de las amigas de la protagonista, su proyecto más acariciado es la apertura de Be A Star, una academia y agencia de talentos que ella misma dirige y que abrirá sus puertas en la Plaza México de Lynwood.

“La idea es preparar a nuestros alumnos pero no dejarlos abandonados al final del curso, sino ayudarlos a conseguir trabajo”, aseguró la entrevistada, quien, a sus 46 años de edad, luce un estado físico impresionante. “En Los Ángeles, el teatro latino no tiene el apoyo y el impulso que merece, y yo he visto desfilar a mucho talento que no tiene ni siquiera un escenario donde presentarse. Quiero darle a la gente el respaldo que me hubiera gustado que a mí me dieran, ayudando a la comunidad latina que quiere hacer algo en el medio artístico”.

De ese modo, Be A Star ofrecerá cursos de canto, baile, locución y conducción, modelaje y actuación. “Yo voy a enseñar canto y actuación y voy a tener como ‘coaches’ a Ramón Valdez y Wendolee Ayala”, precisó Raquenel, para asegurar inmediatamente después que ella misma cuenta con una formación profesional en estas disciplinas.

Con la experiencia a cuestas

Es evidente que nuestra entrevistada se encuentra plenamente metida en toda clase de aventuras cargadas de promesa, pero para muchos, su nombre se encontrará eternamente ligado al escándalo debido a su participación en el tristemente célebre clan Trevi-Andrade, que involucró acusaciones de violación, corrupción de menores y prostitución, y que hizo que ella misma pasara más de tres años en prisión, aunque terminó con una absolución completa de todos los cargos.

“Yo estoy bien, pero fueron 20 años de muchas cosas y sigo canalizando lo que me ha pasado”, comentó, y aludió luego al modo en que las conferencias que dicta bajo el nombre de “Rompiendo cadenas” la ayudan tanto a lidiar con esos traumas como a ayudar supuestamente a otras mujeres. “Me van a ver muchas señoras que han sido víctimas de violencia doméstica, que han sacrificado sus vidas por sus hijos y que no avanzan personalmente por eso”.

Pocos parecen dudar que la culpabilidad mayor en todo lo que se dio con el caso criminal al que nos hemos referido le correspondió al productor musical Sergio Andrade, quien tenía ya 30 años cuando se casó con Raquenel; pero eso no impide que algunos sectores de opinión sigan imponiendo una suerte de condena moral sobre las mujeres de aquel entorno, pese a que todas ellas eran prácticamente adolescentes en esos momentos (Raquenel, conocida en Mary Boquitas, tenía solo 14 años en el momento en que se firmó el acta de matrimonio).

“Cuando alguien me ve ahora, con toda esta seguridad que llevo, puede pensar cualquier cosa; ¡pero ojalá que yo hubiera sido igual de cab… de chiquita!”, enfatizó la artista. “La gente insiste en hablar más de lo que no hice -porque circularon muchas mentiras- que de lo que sí he hecho, a pesar de que llevo ya seis novelas, muchas obras de teatro y sigo adelante”.

“Lo que pasa es que yo tampoco me clavo tanto con la fama. Hay muchos que opinan sin haber estado ahí; ¿ya cambien el canal, no? Y luego dicen que una es la que vive metida en el pasado”, agregó.

Más arriba en este texto, la cantante y actriz habló de la importancia de los cuentos de hadas cuando se es una niña, por lo que le preguntamos si no fue justamente eso lo que la llevó a caer en las redes de Andrade. “Hay que tener cuidado con los cuentos, pero ese sentido de inocencia es siempre importante”, insistió. “Me gustaría en algún momento escribir algo para decirle a otras mujeres que se pongan abusadas, pero sobre todo para prevenir a los papás, porque uno siempre tiene la responsabilidad de sus actos, pero se da menos cuenta de lo que pasa cuando es jovencito”.

“Este señor [Andrade] me sorprendió en todo, porque cuando lo conocí me acababa de mudar de Reynosa, Tamaulipas, que en ese momento era todavía un pueblo, y venía de una de esas escuelas de monjas en las que te preparan un cuento peor que del Blancanieves”, enfatizó. “Todo eso me hizo el blanco perfecto de un abusador como el que fue mi marido”.

Raquenel no parece juzgar a sus padres con dureza, porque recuerda que ambos eran muy jóvenes cuando la tuvieron (“tenían 15 y 19 años”) y no estaban realmente conscientes de lo que ocurría. “Vengo de una familia de artistas locales, y fui la primera al que se le brindó una oportunidad para traspasar fronteras”, dijo. “No hay que olvidar tampoco que [Andrade] era sumamente exitoso; lo llamaban ‘El Rey Midas de la Música’. Y también muy inteligente, claro; tal y como soy ahora, no me hubiera la píldora, pero éramos muy buenos provincianos y caímos en eso”.

Raquenel aseguró que nadie la entrevistó para la creación de la reciente cinta “Gloria”, aunque ella asistió luego a una función especial al lado de la actriz que la interpretó. “Creo que como película tiene momentos emotivos y está bien hecha, pero se asemeja quizás un diez por ciento a la realidad; los hechos están a destiempo, y pusieron a un Andrade demasiado bueno”, aseguró. “Creo que el tratamiento no fue justo y que el modo en que presentaron las cosas fue superficial”.

Aunque sabe que el fantasma de los sucesos de su juventud estará siempre ahí, Raquenel no planea enfocarse en ellos dentro de su carrera artística. “Tampoco es para clavarse tanto; no busco colgarme de nada ni de nadie”, insistió la artista, que no se ha vuelto a casar ni tiene hijos, pero que no descarta adoptar uno. “Como mi vida fue al revés, ahora estoy viviendo como si tuviera 15 años”.

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BE A STAR

Cuándo: 27 de junio al 5 de agosto, L-V

Dónde: Plaza México. 3100 E Imperial Hwy., Lynwood, CA 90262

Costo: Pagos desde $280 (cuotas) hasta $1500 (completo)

Inf.: 626.512.9644