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Marcelo Tobar usó solamente iPhones para hacer una celebrada película que se exhibe en el festival Hola México de L.A.

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Cuando decidió filmar su tercera película con el uso de iPhones, Marcelo Tobar no esperaba que el resultado fuera tan positivo como lo terminó siendo, ya que “Oso Polar” (que se exhibe el 2 de junio a las 2 p.m. y el 6 de junio a las 5.30 p.m. en las salas Regal de LA Live como parte de la edición actual del festival Hola México) se llevó el importante galardón al Mejor Largometraje de Ficción durante el prestigioso Festival de Morelia.

“La idea surgió en el 2014, antes de que supiéramos de la existencia de ‘Tangerine’, la popular cinta estadounidense que se hizo del mismo modo”, nos dijo el director y guionista. “Nuestra intención era simplemente que no fuera un ‘home video’ que terminara en YouTube, sino que fuera una película hecha y derecha; pero creo que lo que ha conectado con el público realmente es su contenido”.

Ninguna de las películas de Tobar se ha hecho con fondos públicos, lo que lo obligó a lidiar permanentemente con bajos presupuestos. “Hacerla con teléfonos fue una manera de abaratar los costos, pero también destinada a saber si se podía hacer algo así y obtener todavía un resultado que se sintiera como una película, como algo que emocionara”, retomó el realizador, que logró terminar el rodaje con los 15 mil dólares que consiguió a través de portales de financiamiento.

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En “Oso Polar”, Heriberto (Humberto Busto) es un exseminarista que se reúne con dos excompañeros de la escuela secundaria, Trujillo (Cristian Magaloni) y Flor (Verónica Toussaint), con el fin de llevarlos en su propio automóvil a una fiesta de reencuentro estudiantil. En el camino, las tensiones del pasado empiezan a reactivarse, combinadas con un relato paralelo que muestra las vivencias de Heriberto durante su ‘retiro espiritual’.

“Me interesaba incluir también esa parte como muestra del modo en que usamos estos aparatos en nuestra vida diaria, porque todos somos unos cineastas en potencia”, precisó Tobar. “Eso dio como resultado dos estéticas: una es la de la cámara autoral, registrada con un lente anamórfico especial que colocamos en dos iPhones 5, y la otra es la que surge de las grabaciones hechas por los personajes, que se hizo con un iPhone 4 para obtener una imagen más cruda”.

“Me interesaba incluir también esa parte como muestra del modo en que usamos estos aparatos en nuestra vida diaria, porque todos somos unos cineastas en potencia”, precisó Tobar. “Eso dio como resultado dos estéticas: una es la de la cámara autoral, registrada con un lente anamórfico especial que colocamos en dos iPhones 5, y la otra es la que surge de las grabaciones hechas por los personajes, que se hizo con un iPhone 4 para obtener una imagen más cruda”.

El director buscaba romper el paradigma de que solo se puede hacer cine si se tiene mucho dinero, lo que lo llevó a insistir en la exhibición de la película tanto en festivales como en salas comerciales; esta última parte se logró en México a través de un trato con la cadena Cinépolis. “Se vio en las mismas pantallas en las que se ve a los Avengers y no lucía para nada ‘chafa’, aunque claro, tiene una crudeza que tiene que ver con el contenido de su historia”, aseguró.

Por ese lado, hay que decir que el relato se encuentra muy bien cuidado y que tiene muchos méritos propios, porque plantea temas relacionados al ‘bullying’, al racismo y a la homofobia. “El racismo es un tema tabú en mi país; la gente dice que no existe y que lo que existe solamente es el clasismo, pero eso no es cierto”, apuntó nuestro entrevistado. “También me interesaba hablar del ‘bullying’, pero del que se produce entre adultos como consecuencia de circunstancias del pasado, y analizar el hecho de que incluso los que se consideran víctimas pueden convertirse en victimarios”.

Tobar nació en Ciudad de México y vivió durante algunos años en París, pero actualmente se encuentra radicado en Los Ángeles, donde está trabajando como guionista para un nuevo proyecto de Netflix del que todavía no puede hablar. Finalmente, tras 13 años de pedidos infructuosos, el gobierno de su país le otorgó los fondos necesarios para hacer su próxima película.

“Va a ser una comedia llamada ‘Los idealistas’; después de hacer una tragedia, quiero hacer algo que no tenga que ver con el lado negativo de la conducta humana”, comentó el realizador capitalino. “El reto va a ser ahora cómo me va salir una película con dinero. Pero sigo interesado en que la gente se empodere y haga cine sin ayuda de las élites, usando la cámara que tenga a la mano, para que esto se convierta en un arte al alcance de todos”.

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FESTIVAL HOLA MÉXICO

Cuándo: Del 1ro al 9 de junio; diferentes horarios

Dónde: Regal L.A. Live, Teatro Montalbán, LA Plaza, Cinépolis

Admisión: $12 (general)

Inf.: holamexicoff.com

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