La cinta ‘Bumblebee’ es humana y sensible

Queda claro que el mayor inconveniente de la saga Transformers es su rutina temática. Y es que, a lo largo de sus cinco entregas, el realizador de todas ellas, Michael Bay, venía repitiendo de alguna manera el mismo esquema.

Seres comunes vueltos héroes en situaciones extraordinarias y ambientes apocalípticos con la Tierra amenazada, alienígenas malvados o justos, jovencita espectacular, combates excesivos y gratuitos, y un entretenimiento ensordecedor y caótico.

Por fortuna, la sexta de la serie, “Bumblebee”, se encuentra casi en el extremo opuesto de las anteriores. Además del toque femenino de una guionista, se ha confiado la dirección al sensitivo Travis Knight, responsable de aquella belleza sombría de animación llamada “Kubo y la Búsqueda Samurái” (2016).

Ello, para trastocar las expectativas de un relato de simple acción destructiva en una trama de maduración adolescente y pérdidas emocionales con un eficaz tono de nostalgia ochentero, con Alf, Pretenders, A-ha, Smiths y más incluidos.

Tanto es así que Bumblebee es prácticamente una paráfrasis de “E.T. el Extraterrestre” (Spielberg, 1982): un alien -tierno en ocasiones- que busca regresar a su planeta, la bici es suplida por una motoneta, científicos y militares violentos e insensibles y jovencitos de suburbio perdedores con una oportunidad de redención.

La acción está muy controlada y las secuencias son breves pero de una eficacia impresionante, como la llegada de Bumblebee a la Tierra en 1987 o la secuencia climática en la torre.

Más allá del enfrentamiento entre Autobots y Decepticons, el filme se concentra en ese intercambio de sentimientos entre una huraña chica huérfana (Steinfeld) y un volkswagen amarillo que sirve de camuflaje a un adorable defensor del universo.

Bumblebee

Califica: Tres estrellas

Dirige: Travis Knight

Actúan: Hailee Steinfeld, John Cena y Jorge Lendeborg Jr.

Duración: 114 min.