Anuncio

Con dos Oscares en la mano, Guillermo del Toro promovió el uso de la fantasía para hablar de problemas actuales

Guillermo del Toro posa con las dos estatuillas que lo consagraron como el cineasta más celebrado en la edición número 90 del Oscar.

Guillermo del Toro posa con las dos estatuillas que lo consagraron como el cineasta más celebrado en la edición número 90 del Oscar.

(PAUL BUCK / EFE)
Share

Haber ganado dos Premios de la Academia en categorías tan importantes como Mejor Película y Mejor Director no es solo un enorme motivo de alegría para Guillermo del Toro, sino que, como buen amante de las historias sensibles sobre monstruos que es, representa para él la posibilidad de que otros realizadores sigan sus pasos con el fin de hacer algo semejante a “The Shape of Water”.

“Para mí, lo más hermoso es que ahora los jóvenes que quieren hacer cine pueden escoger entre diferentes modelos: ser unos cineastas comprometidos con la realidad o ser unos cineastas comprometidos con la irrealidad pero con la verdad”, dijo él mismo en la sala de prensa, aludiendo al modo en que su historia sobre el romance entre una empleada de limpieza y un humanoide anfibio se conecta con las situaciones de intolerancia que se viven actualmente.

“La fantasía a veces lo hace, pese a que no la tomamos como debe ser y al hecho de que una de las cosas más fascinantes de Latinoamérica es la fabulación, las parábolas que resultan pertinentes para los momentos difíciles”, precisó el artista, quien coescribió también el guión de la celebrada cinta.

Anuncio

Preguntado por el deseo de ubicar la película en el Baltimore de los ’60, Del Toro explicó que se enamoró de ese lugar luego de ver tres películas que para él son esenciales: “Tin Men”, “Avalon” y “Diner”, dirigidas todas por Barry Levinson y emplazadas entre los ’40 y los ’60, pese a que se filmaron entre los ’80 y los ‘90.

“Ya sé que la c… con los acentos, pero quería capturar ese espíritu en el que se combina lo católico con lo industrial en una locación cercana al mar”, afirmó. “Y, por supuesto, hay que considerar que [el legendario cineasta independiente] John Waters es de allí”.

Al ofrecer sus agradecimientos en el podio, el tapatío mencionó varias veces a su país de origen. “Hay que recordar de dónde venimos; de hecho, viajaré en dos días [a Guadalajara] para ver a mi papá y a mi mamá con estos dos bebés”, declaró en la misma sala de prensa, refiriéndose a los trofeos dorados que tanta felicidad le están dando, y que lo colocan ahora a la altura de sus compadres Alejandro G. Iñárritu y Alfonso Cuarón.

Anuncio