Así presume Guillermo del Toro a su México

Seguro del talento de los animadores tapatíos y de la importancia de resaltar lo que se hace en suelo mexicano, Guillermo del Toro filmará una pequeña parte de su película de animación stop motion Pinocho en Guadalajara. Esto lo hará, tentativamente, de manera simultánea con la producción que se instalará en Portland, de enero a mayo de 2020, cuando el director tapatío esté en plena filmación de su proyecto.

Además, para estacionarse en Jalisco deberá quedar listo El Taller del Chucho, espacio diseñado para la producción de stop motion nacional y catapultarla a nivel internacional. Para ello, se realizan ajustes en el espacio conformado por naves industriales en Calle 2, y muy posiblemente, se hagan pruebas en este 2019.

“El taller no estaría este año. Es muy probable que empecemos a filmar este año para probar cosas, no hay una fecha. “Lo importante es rodar un ciclo de un títere caminando de izquierda a derecha, durante dos días, para ver qué pasa con la luz y con el equipo. Hay mucho qué probar”, apuntó el ganador del Óscar en entrevista.

Del Toro ofreció un tour guiado a un grupo de visitantes en la exposición “En Casa con mis Monstruos”, donde compartió que en su obra siempre ha buscado incluir elementos de la cultura mexicana, la cual lo inspira. También mencionó algunos guiños conocidos por pocos. “Si ustedes ven El Espinazo del Diablo, pues será España, pero en realidad son las playas de la Laguna de Sayula; será la Guerra Civil Española, pero es la Revolución Mexicana; eso es innegable.

“Algún día me gustaría volver a México y hacer una película que concibiera la atmósfera de los ejercicios de encierro de Agustín Yáñez en “Al Filo del Agua”, que es profundamente espesa, muy de provincia”, mencionó a los asistentes, entre los que se encontraban la productora mexicana Bertha Navarro y el compositor español Javier Navarrete.

Asimismo, el tapatío señaló que hay tres museos interesados en exponer sus piezas. “Para mí es muy importante que las piezas estén en exhibición permanente y no guardadas en una bodega, porque para eso mejor que se queden en mi casa”, argumentó el cineasta. Sobre la posibilidad de que el sinfónico de En Casa con mis Monstruos, que tuvo dos funciones este domingo en Auditorio Telmex, de Guadalajara, llegue a otras ciudades, indicó que eso sería algo muy bueno.

“Lo ideal es que continúe viéndose de manera accesible o gratuita, pero el compromiso inmediato que tenía yo era con Guadalajara”, concluyó