Ministra mexicana revela diálogo con autodefensas para que dejen las armas

La secretaria mexicana de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, declaró este martes que el Gobierno dialoga con “muchos grupos” que están dispuestos a dejar las armas y avanzar hacia la pacificación del país, en referencia a los llamados grupos de autodefensa que operan en varios estados.

Durante su participación en una reunión en la Secretaría de la Función Pública para coordinar el diseño del Plan de Acción 2019-2021 de México ante la Alianza para el Gobierno Abierto, Sánchez Cordero dijo que funcionarios del Gobierno mexicano han estado en zonas de los estados de Guerrero, Tamaulipas y Michoacán realizando gestiones “para poder avanzar en la pacificación del país”.

Sin especificar con quiénes se han establecido contactos, la secretaria mencionó a “estos grupos que al final del día se han estado combatiendo unos a otros, y han estado cometiéndose los homicidios de un grupo contra los otros”.

Al salir de la reunión, la ministra fue interrogada por periodistas sobre si se estaba buscando una tregua con el crimen organizado.

“No, estamos dialogando ahora. Estamos dialogando con muchos grupos y nos han manifestado ya que no quieren seguir en esta violencia, que ellos quieren deponer las armas y caminar hacia la paz”, replicó.

Al pedírsele que precisara a qué grupos se refería, se limitó a responder: “Varios grupos, no puedo especificarlos en este momento, pero son varios grupos de diversos estados de la República (mexicana)”.

Más tarde, la Secretaría de Gobernación aclaró en un boletín que durante la reunión de coordinación Sánchez Cordero habló de “acciones encaminadas a la pacificación del país, entre ellas el diálogo con grupos de autodefensa en distintos estados del país, que han manifestado que no desean continuar por la ruta de la violencia y, por el contrario, quieren caminar hacia la paz”.

En años recientes han surgido policías comunitarias o grupos de autodefensa para hacer frente a robos, extorsiones, secuestros y otros delitos de organizaciones del crimen organizado, principalmente en Michoacán y Guerrero.

Algunos de esos grupos han logrado reconocimiento oficial, mientras otros actúan al margen de la ley y en ocasiones han entrado en conflicto con las fuerzas de seguridad oficiales y entre sí.