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Dedican servicio religioso a mexicana muerta en accidente aéreo de Etiopía

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EFE

Familiares de la mexicana Graziella de Louis Ponce, fallecida en el accidente aéreo del domingo pasado en Etiopía, celebraron este miércoles un servicio religioso en su memoria en Mérida, en el estado mexicano de Yucatán.

El servicio religioso se celebró en la Iglesia de Nuestra Señora de María Inmaculada, por el descanso eterno de la mexicana tras de muerte el domingo pasado, en el accidente aéreo en Bishoftu, Etiopía.

De Louis Ponce fue una de las 157 ocupantes del vuelo comercial de Ethiopian Airlines que fallecieron tras el desplome de la aeronave, por causas hasta ahora no precisadas.

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Además de los familiares, en la misa en memoria de la ex ejecutiva y traductora de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se observó una discreta asistencia de feligreses, además de representantes de medios mexicanos e internacionales.

Una prima hermana suya que declinó identificarse, dijo, a nombre de los familiares que no harían más declaraciones con relación a su pariente.

Alegó que las declaraciones y publicaciones hechas hasta ahora sólo han “tergiversado” lo sucedido en torno al accidente y a la historia personal de Graziella de Louis Ponce, por lo que no harán pronunciamiento alguno sobre lo sucedido.

La misa en memoria de Ponce y de otras personas que fallecieron, fue oficiada en un templo de la exclusiva colonia Campestre de esta ciudad, capital de la suroriental provincia mexicana de Yucatán, de donde la víctima era originaria.

El vuelo comercial de Ethiopian Airlines que partió de Addis Abeba hacia Nairobi, Kenia,se estrelló poco después de su despegue en la localidad de Bishoftu, a unos 60 kilómetros de la capital etíope.

El accidente, cuyas causas son investigadas, causó la muerte de 19 personas vinculadas a la ONU, por lo cual, su secretario general, el portugués Antonio Guterres, lamentó lo sucedido en un pronunciamiento oficial.

Graciella de Louis Ponce fue la única ciudadana mexicana que abordó el avión siniestrado y estaba vinculada, por parentesco, a una de las familias de mayor peso económico del sureste de México, involucrada en el negocio de bebidas embotelladas, automovilístico e industrial.

El accidente aéreo llevó a diversos países y compañías de aviación a suspender temporalmente los vuelos de los aviones Boeing MAX 737-8 y 737-9 hasta en tanto que se tengan más informaciones sobre el accidente.

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