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Uribe se abstiene de opinar sobre manejo de Duque en caso de exministro

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EFE

El expresidente colombiano Álvaro Uribe se abstuvo de opinar sobre el manejo gubernamental del caso de extradición del exministro Andrés Felipe Arias, cuya defensa lamentó que el embajador colombiano en Washington, Francisco Santos, no estuviera presente en la audiencia celebrada hoy en Miami.

Tanto el hoy senador Uribe como Arias, que fue ministro de Agricultura durante su Presidencia, testificaron ante el juez James Lawrence King, quien rechazó un pedido de libertad bajo fianza con el argumento de que hay “riesgo de fuga”.

El juez basó la audiencia de dos horas principalmente en la carta enviada en diciembre pasado por el embajador Santos al Departamento de Justicia estadounidense en la que pide reconsiderar la solicitud de libertad bajo fianza del exministro Arias.

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El fiscal Robert J. Emery aseguró hoy que dicha carta no se trataba de una documento oficial del Gobierno colombiano, mientras que el juez lo calificó de una “opinión”.

Emery llegó a señalar que si fuera oficial por qué no de plano el Gobierno colombiano retiraba el pedido de extradición de Arias, que fue detenido en 2016 en Florida por esa solicitud planteada durante la Presidencia de Juan Manuel Santos (2010-2018).

Sobre si existía esa posibilidad en el Gobierno de Iván Duque, el expresidente Uribe dijo a Efe que como senador de la República no podía “opinar sobre un tema que es del gobierno”.

Sin embargo, la defensa del exministro colombiano lamentó que el embajador Santos no acudiera a la vista, en la que por tercera vez el juez rechazo otorgarle la libertad bajo fianza.

David Markus, uno de los abogados de Arias, dijo a la prensa que “desafortunadamente” Santos no se hizo presente en la vista.

“El juez quiso escuchar al embajador de Colombia porque el embajador escribió la carta al tribunal diciendo que liberara a Andrés. Lamentablemente el embajador no estuvo aquí hoy y por eso se le negó la libertad bajo fianza”, manifestó Markus.

A la pregunta de Efe de si Santos había sido convocado, Markus señaló que sí. “Nosotros lo necesitábamos aquí hoy”, precisó.

Sobre esa ausencia, Uribe se limitó a decir que durante la audiencia el juez reclamó dicha presencia oficial.

Arias fue detenido en agosto de 2016 en Estados Unidos por una solicitud de extradición de la justicia colombiana, que lo condenó a 17 años y 4 meses de prisión en 2014 por los delitos de celebración de contratos sin cumplimiento de requisitos legales y peculado a favor de terceros.

“Si Colombia va a apoyar a Andrés, el momento es ahora”, enfatizó Markus, quien aseguró que “el asunto está ahora en el Departamento de Estado”, que será el que decida si “debe ser extraditado o no”.

“Una carta era bonito, pero no es suficiente”, agregó Markus al señalar que era necesario el apoyo del embajador y del presidente Duque.

Sobre la misiva, Uribe dijo que “el embajador Santos nunca habría enviado esa carta si no fuera autorizado por el gobierno nacional” y recordó que Duque señaló que la habían “enviado por razones humanitarias”.

El exministro llegó a Estados Unidos en 2014, en coincidencia con su condena por el caso Agro Ingreso Seguro, un programa de créditos blandos a pequeños agricultores para instalar sistemas de riego, del que se aprovecharon grandes terratenientes, e inmediatamente pidió asilo político.

Muy cercano al expresidente Uribe, líder del partido que desde agosto pasado gobierna en Colombia, Arias afirma ser víctima de jueces “corruptos” e “ilegítimos” que le dictaron una “condena descabellada” por un delito que según él no cometió.

En noviembre pasado el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas falló a favor de Arias en una demanda que planteó contra el Estado colombiano por las “repetidas y graves violaciones” de sus derechos fundamentales, según informaron sus abogados.

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