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El Pentágono desarticula red de sextorsión a militares por parte de reclusos

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EFE

El Departamento de Defensa informó hoy de la desarticulación de una red de extorsión formada por reclusos que había conseguido recaudar cientos de miles de dólares gracias al chantaje a militares a los que hacían creer que mantenían relaciones con menores a través de internet.

Según el Pentágono, los chantajistas, muchos de ellos reclusos que se encuentran presos en cárceles de Carolina del Sur, se hacían pasar por mujeres jóvenes en las redes sociales y en diversas páginas web de citas para entrar en contacto con los soldados, que pensaban que eran mayores de edad.

“Con nada más que simples teléfonos inteligentes y una pocas pulsaciones, reclusos de Carolina del Sur junto con cómplices en el exterior convirtieron en víctimas a cientos de personas”, señaló el director del Servicio de Investigación Criminal de la Marina, Andrew Traver.

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Tras entablar algún tipo de contacto con ellos, comenzaba una simple relación romántica o, en algunos casos, un intercambio de fotografías de alto contenido sexual.

Es entonces cuando aparecía en escena el presunto padre de la joven, que se ponía en contacto con el militar al que reprochaba que mantuviera una relación con su hija quien, según aseguraba, era menor de edad.

El progenitor falso amenazaba con presentar cargos ante las autoridades en caso de no recibir algún tipo de compensación económica, algo a lo que muchas de las víctimas accedieron ante la posibilidad de tener que enfrentarse a una acusación de abuso de menores.

“Este despreciable ataque a nuestros valientes soldados nunca será tolerado. No aceptaremos que redes criminales perjudiquen la preparación de nuestras Fuerzas Armadas”, agregó Traver.

En total, según un comunicado emitido por el Pentágono, unos 442 militares de todas las ramas del Ejército abonaron más de 560.000 dólares a la red de chantajista, que estaba compuesta tanto por presos como por delincuentes en libertad.

Más de 250 personas han sido investigadas en el marco de la operación Fiesta Sorpresa, que comenzó en enero del 2017, y se enfrentan a cargos penales.

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