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Pemex acumula pérdidas pese a trimestre positivo por barril y tipo de cambio

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EFE

Petróleos Mexicanos (Pemex) perdió 1.227 millones de dólares en los primeros nueve meses del año, pese a un tercer trimestre con ganancias gracias a un peso fortalecido y un mayor precio por barril en la mezcla mexicana, destacó hoy la compañía estatal.

“En el tercer trimestre el precio promedio de la mezcla mexicana de exportación se mantuvo por arriba de 65 dólares por barril y el tipo de cambio del peso frente al dólar se apreció 5 % durante el trimestre”, señaló el director corporativo de Finanzas de Pemex, David Ruelas, al presentar el informe financiero ante inversionistas.

Entre enero y septiembre de este año, la empresa perdió 1.227 millones de dólares, un dato que contrasta con el resultado positivo de 1.039 millones de dólares del mismo periodo de 2017.

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La empresa ingresó 67.655 millones de dólares por ventas, 27,4 % más, al que hay que restar el deterioro de los activos.

Pero la empresa salió de cifras rojas en el tercer trimestre del año, lo que sirvió hoy para que la compañía sacara músculo con sus cuentas.

Del 1 de julio al 30 de septiembre, la empresa ganó 1.423 millones de dólares, un éxito si se compara con las pérdidas de 5.594 millones de dólares del mismo periodo de 2017.

Los ingresos también aumentaron 33 % hasta los 23.344 millones de dólares, destacando el 62,8 % de aumento en las ventas por exportación, hasta 9.859 millones de dólares.

El rendimiento antes de impuestos y derechos (ebitda) se ubicó en 1.423 millones de dólares, saliendo también de pérdidas.

“El ebitda en el tercer trimestre es el mejor resultado de este indicador observado desde 2015”, destacó Ruelas.

Subrayó que la firma, tras severos ajustes, se desempeña “de manera sólida” durante 2018 a nivel financiero y operativo, lo que permitiría “alcanzar el equilibrio” en años futuros.

En este tercer trimestre, Pemex anunció el descubrimiento en aguas someras (poco profundas) de las Cuencas del Sureste. Son los yacimientos de Manik y Mulach, con más de 180 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

A la larga estos campos, junto a otros que están a punto de entrar en desarrollo, pueden ayudar a revertir el declive productivo de esta empresa, que sigue siendo uno de los principales aportadores de ingresos a los presupuestos públicos, alrededor del 15 % del total.

Según el reporte, la producción de crudo fue de 1,86 millones de barriles diarios en los primeros nueve meses del año, 5,5 % menor.

Asimismo, la producción de gas natural se redujo en 8,2 % al situarse en 3.912 millones de pies cúbicos diarios (MMpcd).

La industria petrolera en México se encuentra en una etapa de transformación tras la reforma energética del 2014 que abrió el sector a la iniciativa privada con la licitación de campos y las asociaciones con Pemex.

Consciente de ello, hoy Ruelas remarcó que la compañía busca “modernizar la empresa en términos de tecnología” y ha desarrollado una “nueva herramientas y soluciones digitales”.

En la presentación no se hizo ninguna referencia al cambio político que está a punto de enfrentar México cuando el 1 de diciembre asuma la Presidencia el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien ha prometido invertir en la industria nacional rehabilitando refinerías y construyendo una de nueva.

En días pasados, fue de hecho muy crítico con Pemex porque esta anunció que asignó cuatro cargamentos de 350.000 barriles, cada uno para la importación de crudo ligero “Bakken”, que serían entregados en noviembre.

“Esta decisión forma parte de la estrategia para mejorar la dieta de petróleo que se utiliza en el Sistema Nacional de Refinación, lo que permitirá obtener productos destilados de mayor valor económico”, indicó la compañía.

Pero para el futuro presidente esta solución prueba el fracaso de “la política económica neoliberal o neoporfirista de los últimos 30 años”.

“Además de corruptos e ineficientes son unos cinicazos”, dijo en Twitter, disparando contra los promotores de la reforma energética.

Este viernes, Ruelas remarcó que Pemex continúa siendo el “jugador principal” en el abasto de combustible nacional, con una participación de 96 %.

Días antes de este rifirrafe, la agencia calificadora de riesgo Fitch Ratings modificó de estable a negativa la perspectiva crediticia a Pemex ante la “incertidumbre creciente” sobre su estrategia futura de negocios, en un mensaje que fue interpretado por analistas como una advertencia a López Obrador.

Pemex perdió 16.847 millones de dólares en 2017, lo que representó un aumento de 74,4 % frente al resultado negativo de 9.663 millones de dólares del 2016.

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