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Gobernador de Chiapas asegura que protegen derechos humanos de migrantes

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EFE

Tapachula (México), 22 oct.- El gobernador del estado de Chiapas, sureste de México, Manuel Velasco, declaró hoy a Efe que se trabaja para proteger los derechos humanos de la caravana de migrantes, que este lunes denunció abusos de las autoridades.

Luego de recorrer los zonas que han albergado a los extranjeros, en las instalaciones de la Feria Mesoamericana en esta localidad, Velasco dijo que trabajan en coordinación con las instancias federales y el Instituto Nacional de Migración (INM).

En los albergues “pueden ver que hay seguridad por parte de los tres instancias de Gobierno, también hay médicos y enfermeras, se está dando toda la atención y se están proporcionando víveres”, apuntó Velasco.

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El gobernador dijo que también están trabajando “para garantizar la seguridad en los municipios de la frontera sur”, esto ante la situación que se vive en la frontera México-Guatemala con la llegada de miles de centroamericanos en la caravana.

Velasco apuntó que las autoridades seguirán dando toda la atención al contingente de centroamericanos en Chiapas “estamos pendientes que sea un proceso de paz y de manera ordenada”.

Al menos 3.000 hondureños cruzaron la frontera con México, otros más esperan en el puente internacional del Río Suchiate y más de 2.000 decidieron retornar a su país.

Este lunes, migrantes que participan en la caravana que pretende llegar a Estados Unidos y un grupo de ONGs denunciaron violaciones a los derechos humanos en México, entre estas detenciones arbitrarias y la separación de familias.

“Han hecho un infierno de nuestros países. (...) Pedimos a México que no reprima esta caravana”, dijo en una rueda de prensa desde Tapachula, en el suroriental estado de Chiapas, el director de la ONG Pueblo Sin Fronteras, Irineo Mujica, que apoya esta caravana que partió el 13 de octubre de San Pedro Sula (Honduras).

Este lunes, el grueso del contingente de migrantes que ingresaron a territorio mexicano partió de Tapachula hacia Huixtla, a unos 35 kilómetros.

La caravana salió el 13 de octubre de San Pedro Sula (Honduras) con al menos unas 5.000 personas y una segunda caravana, de unas 2.000 personas, arrancó el fin de semana.

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