Segundo juicio contra exjefe de campaña Trump se retrasa al 24 de septiembre
El segundo juicio contra Paul Manafort , el exjefe de campaña del ahora presidente, Donald Trump, que está siendo procesado por las investigaciones en el marco de la trama rusa, fue retrasado hoy una semana hasta el 24 de septiembre.
La jueza federal que lleva el caso en una corte del Distrito de Columbia en Washington aceptó la petición de la defensa de Manafort de posponer el comienzo de la causa, que inicialmente estaba previsto para el 17 de septiembre.
Manafort fue declarado culpable de ocho delitos de fraude en su primer juicio y afronta ahora uno segundo, mientras se especula sobre su posible colaboración con las autoridades para reducir la condena o sobre un hipotético indulto de Trump.
Rudy Giuliani, abogado del presidente, informó la semana pasada de que Trump había pedido consejo a su equipo legal sobre un potencial perdón a Manafort, pero le aconsejaron que era mejor abordar la situación cuando la investigación de la trama rusa hubiera finalizado.
El diario “The Wall Street Journal” reveló ayer que la defensa de Manafort había establecido conversaciones con la fiscalía especial de la causa para analizar una declaración de culpabilidad, aunque finalmente no llegaron a un acuerdo.
Ahora, el retraso del juicio vuelve a avivar los rumores sobre la posible cooperación con las autoridades.
El fiscal especial para la trama rusa, Robert Mueller, investiga desde mayo de 2017, de manera independiente al Gobierno, los posibles lazos entre miembros de la campaña de Trump y Rusia, a la que las agencias de Inteligencia acusan de interferir en los comicios presidenciales de 2016.
Manafort supuestamente trabajó entre 2006 y 2017 para Gobiernos extranjeros, incluido el Ejecutivo prorruso del expresidente ucraniano Víktor Yanukóvich (2010-2014), y para oligarcas rusos, a los que ayudó a mejorar su imagen en Washington sin comunicárselo a las autoridades, lo que constituye un crimen.
El proceso contra él es producto de la investigación de Mueller, pero no está relacionada directamente con las actividades que desempeñó entre marzo y agosto de 2016 en la campaña de Trump, donde llegó a ser el jefe hasta que se vio obligado a dimitir por ocultar el cobro de 12,7 millones procedentes de Yanukóvich.
