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Senador republicano Cornyn dice tener apoyo para aumentar control de armas

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EFE

El senador republicano por Texas John Cornyn aseguró hoy tener el apoyo suficiente en la Cámara Alta para aprobar un proyecto de ley que refuerce el sistema nacional de verificación de antecedentes usado para la compra de armas en el país estadounidense.

La oficina de Cornyn informó hoy que ha conseguido el respaldo de seis legisladores más, con lo que el número total de apoyos a esta ley asciende a 62.

Este aumento significa que el apoyo rebasa la barrera de los 60 votos necesarios para superar el voto de procedimiento, por lo que el proyecto de ley pasaría al pleno y únicamente necesitaría una mayoría mínima (51 de 100 senadores) para ser aprobado.

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Esta legislación, conocida como “Fix NICS Act”, reforzará las leyes existentes para garantizar que las autoridades transmitan los antecedentes penales a la base de datos del Sistema Nacional Instantáneo de Verificación de Antecedentes Criminales (NICS, en inglés), utilizado por el FBI para comprobar en cuestión de minutos si alguien que solicita comprar un arma ha cometido algún delito.

Hasta ahora, esta base de datos está incompleta porque algunos estados y agencias federales no cumplen con el requisito de informar al NICS, por lo que la ley pretende sancionar a aquellos entes que no lo hagan e incentivar a los estados que lo documenten debidamente.

Cornyn empezó a promover esta reforma después del tiroteo masivo que sacudió la pequeña localidad texana de Sutherland Springs el pasado 5 de noviembre, fecha en la que un tirador mató a 26 feligreses que estaban en una iglesia baptista local.

El autor de esa masacre, el exmiembro de la Fuerza Aérea de EEUU Devin Kelley, tenía antecedentes por abuso doméstico a su exmujer e hijo y había sido ingresado en un centro de salud mental.

Sin embargo, la Fuerza Aérea reconoció que no había introducido correctamente estos antecedentes en la base de datos del FBI, por lo que Kelley no tuvo problema en adquirir el arma y perpetrar uno de los peores ataques en la historia reciente de EEUU.

El último gran tiroteo, llevado a cabo en febrero por un joven en una escuela secundaria de Parkland (Florida, EEUU) y que se saldó con 17 víctimas mortales, reavivó el debate sobre el control de armas en el país e hizo que numerosos senadores se replantearan su posición en este sentido.

A pesar de estas intenciones de cambio, la mayoría de los republicanos no contemplan aumentar la edad mínima de compra de armas, situada en los 18 años, o prohibir la venta de armas de asalto, consideradas de guerra y usadas en los últimos grandes tiroteos.

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