Anuncio

Rusia niega que sus tropas se hayan retirado de enclave kurdo en Siria

Share

Rusia negó hoy que sus tropas hayan comenzado a retirarse de Afrín, un enclave kurdosirio al norte de Siria, ante una inminente operación turca en la zona.

“Estas informaciones se han desmentido”, aseguró el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, preguntado por las noticias publicadas al respecto desde Turquía.

Según la agencia semipública Anadolu, unos 170 soldados rusos estacionados en la localidad de Kefer Cenne habrían empezado hoy a retirarse de la región, y se habrían desplazado unos 17 kilómetros hacia el sur.

Anuncio

El repliegue ruso habría empezado poco después de que el ministro de defensa turco, Nurettin Canikli, dijera hoy que Moscú había dado el visto bueno a retirar sus activos militares de Afrín.

Lavrov negó ese mensaje y subrayó que ahora mismo la prioridad rusa es garantizar una verdadera “zona de desescalada” en la región de Idleb en coordinación con Turquía e Irán.

“Lamentablemente nuestros socios turcos no han establecido todavía todos los puntos de control que debían crear según el acuerdo”, apuntó.

Lavrov dijo que su país está en contacto con Ankara y confió en que la situación pueda resolverse.

Turquía amenaza desde hace días con una intervención en el norte de Siria para impedir que fuerzas kurdas puedan controlar un corredor a lo largo de la frontera turcosiria.

El ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, declaró ayer que Ankara está debatiendo con Moscú y Teherán sobre el uso del espacio aéreo del norte de Siria, ante una posible intervención de Turquía contra las milicias kurdas YPG.

Aunque las Unidades de Protección Popular (YPG) son aliadas de Estados Unidos en Siria y han recibido armas norteamericanas para luchar contra el Estado Islámico (EI), Ankara las considera terroristas por sus estrechos vínculos con el Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurdoturca.

Çavusoglu instó a Rusia a no oponerse a una operación turca en Siria, pero matizó que coordinará con Moscú cualquier paso a dar.

Irán y Rusia son valedores del Gobierno sirio, mientras que Turquía apoya a la oposición islamista al presidente Bachar al Asad.

Anuncio