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Sheriff cumple 50 años de servicio con la bandera de proteger desfavorecidos

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Para el alguacil Tony Estrada, 2018 representa mucho más que un año nuevo, significan 50 años sirviendo a la seguridad pública en Arizona, siempre con la bandera de “proteger a los más desfavorecidos”.

Estrada, de 74 años y desde 1993 alguacil del condado Santa Cruz, un puesto para el que fue elegido después de 25 años de servicio en el Departamento de Policía de la ciudad de Nogales (Arizona), señala en una entrevista con Efe que su apuesta es por la compasión.

“Este es un país muy rico, hay lugar para la gente que viene a trabajar, lo más cruel que puede hacer un gobierno es separar familias y lo estamos viendo, esta no es la América que nosotros conocemos, tiene que ser una nación de compasión”, dice.

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Por declaraciones como esta, Estrada parece la cara opuesta de Joe Arpaio, quien se hizo conocido cuando era alguacil del condado Maricopa, también en Arizona, por sus polémicas medidas y su dureza hacia los inmigrantes indocumentados.

Oriundo de la homónima ciudad mexicana de Nogales, en el estado de Sonora, Estrada aprendió desde pequeño las necesidades de los inmigrantes que suelen abundar en las zonas fronterizas, razón por la que es mucho “más sensible” a las políticas antiinmigrantes.

“En repetidas ocasiones me han dicho que apoyo a la inmigración ilegal, claro que estamos de acuerdo que crucen legalmente, pero la triste realidad es que mucha de esta gente es muy pobre y cruzan para realizar un sueño, es gente valiente que nada más viene con una mochila y un galón de agua”, dice.

Y agrega: “cuando veo esa gente trabajadora y religiosa, es cuando pienso que ahora más que nunca se debe de tener una reforma de migración justa”.

Estrada, actualmente el único “sheriff” hispano en toda Arizona, lo que para él significa “un gran honor”, no está de acuerdo con el muro que el presidente Donald Trump quiere levantar en la frontera.

“Quieren gastar mucho dinero en construir un muro, en vez de tirar el dinero en eso, en esta nación también hay pobreza, niños sin comer, se pierden las prioridades cuando se quiere construir una valla”, señala.

Entre sus satisfacciones se encuentra el haber consolidado un equipo de trabajo firme y noble en sus funciones al frente del condado de Santa Cruz.

“Tenemos mucho cuidado de escoger lo mejor, siempre luchando por los buenos salarios, aunque algunos no se quedan, como ven un departamento chico buscan otros terrenos y los ayudamos a que logren sus sueños”, comentó.

Estrada está en su séptimo mandato como alguacil de Santa Cruz y ya está pensando en el retiro.

“Tengo pensado que este sea mi última administración, va empezando el segundo de cuatro años, suena bien retirarse luego de 50 años de trabajo, es una meta grande de la cual me siento muy orgulloso”, dijo.

Cuando se le pregunta cómo se siente tras cinco décadas de servicio responde: “como una persona que logró un sueño, y este mensaje positivo se lo mando a todos las personas que llegan a este país, estos sueños se pueden lograr si estamos dispuestos a darles la oportunidad a otros”.

“Es un sueño que todavía estoy viviendo, me siento muy afortunado y agradecido por la oportunidad que me han dado de ser parte de esta profesión tan noble y, sobre todo, agradezco a la comunidad que ha creído en mí, cuando empecé en esta carrera nunca pensé que iba a llegar a este punto”, dice.

Cuando se retiró del Departamento de Policía de Nogales con el rango de capitán, Estrada pasó dos años realizando otras actividades como comerciante.

“Cuando me jubilé puse una florería, oficio que aprendí de mi compadre, y luego pensé: ‘vamos a ver qué puede pasar si corro para el puesto de alguacil’. Sabía que tenía el apoyo de la comunidad porque fui muy activo”, recordó.

En las elecciones primarias venció al entonces “sheriff” Alfonso Bracamonte y en la elección general venció a otro candidato de la ciudad de Chicago que buscaba el mismo cargo. El 1 de enero del año 1993 comenzó su carrera como alguacil del condado Santa Cruz.

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