Almudena Grandes: Hay más distancia entre los catalanes que entre políticos
La escritora Almudena Grandes defendió hoy que, “aunque parezca raro”, la distancia que hay “entre el Gobierno de España y el gobierno de Puigdemont es más pequeña que la que hay entre catalanes y catalanes del mismo edificio”.
“Eso es lo peligroso de verdad, lo grave que está pasando”, dijo a Efe la escritora, quien se encuentra en la mexicana Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara presentando su última novela, “Los pacientes del doctor García”.
La crisis catalana no es realmente “un problema para España”, dado que lo “grave” es lo que está ocurriendo en la propia región, donde hay una “fractura de la sociedad que enfrenta a catalanes contra catalanes”.
En el resto de España, “lo de Cataluña se ha visto con cierta indignación, ha estado el fenómeno folclórico de las banderas (en los balcones), pero ahora la gente está cansada y quiere hablar de otra cosa”, reflexiona.
La escritora reconoce que es “lamentable” que se hayan dado episodios como el de las personas que corearon el “a por ellos” a los guardias civiles que partieron hacia Cataluña para estar allí en el referéndum del 1 de octubre, pero no cree que sea “significativo de la sociedad española en general”.
“Igual que tampoco creo que los excesos de la CUP (Candidatura de Unidad Popular, partido independentista) sean significativos de la sociedad catalana en general”, agrega Grandes, a quien le parecen “bastante desconcertantes” los rumbos que está tomando la crisis.
Asimismo, señala que la reacción del resto de España la ha sorprendido por su “templanza”, en comparación con lo que habría ocurrido hace unas décadas: “Todavía me acuerdo de una época no muy lejana en la que la gente que ahora ha puesto una bandera en su balcón habría optado por que vaya el Ejército a invadir”.
Grandes tilda de “mentira tremenda” la “especie de fantasía” que tienen algunas personas que comparan la situación actual con la que ocurrió en los años 30, cuando “había una miseria negra que justificaba cualquier estallido revolucionario”. Ahora ese fenómeno “no lo hay”.
La autora respalda que el gran beneficiado de la crisis catalana va a ser el Partido Popular, y “por eso ha dejado que las cosas se pudran, porque electoralmente le conviene”.
“El gran mal del que la democracia española se ha librado hasta este momento, que es la creación de una extrema derecha fascista y xenófoba, no se va a consumar”, pero el problema es que esto no ocurrirá “porque todos los que gritan ‘a por ellos’ votan al PP y tienen un lugar”, sentencia.
