Jeep Grand Cherokee Trackhawk, el SUV todocaminos rey de los circuitos
En un mundo cada vez más dominado por los todocaminos SUV y la potencia, Jeep es de momento el rey de ambas categorías con el Grand Cherokee Trackhawk, el SUV más potente del mundo gracias a sus 707 caballos.
Cuando Fiat Chrysler (FCA) lanzó en 2014 el motor HEMI Hellcat sobrealimentado de 6,2 litros en V8 capaz de generar 707 caballos de potencia en el Dodge Challenger SRT, la imaginación se disparó para muchos.
¿Qué otro vehículo podría ser propulsado por el motor que genera un par motor de 645 libras-pie?
Tras Challenger el siguiente modelo al que se equipó con el HEMI Hellcat fue el Dodge Charger. Y ahora, el turno le ha tocado al buque insignia de la marca Jeep, el Grand Cherokee.
Como ha indicado el director de Jeep, Mike Manley, “el Jeep Grand Cherokee, que desde hace mucho está reconocido como el SUV líder en capacidad, es ahora el SUV todocaminos más potente y rápido gracias al nuevo Trackhawk de 707 caballos”.
A pesar de las 6.600 libras (casi 3.000 kilos) de peso del Trackhawk, el Hellcat es capaz de lanzar el Jeep de 0 a 60 millas por hora (0 a 96,5 kilómetros por hora) en 3,5 segundos. Y colocar su velocidad máxima en 180 millas por hora o 289 kilómetros por hora.
Estas cifras son fáciles de conseguir por cualquiera gracias al “modo de lanzamiento” que el Trackhawk incorpora.
Basta con apretar un botón situado junto a la palanca de cambios, mantener al mismo tiempo los pedales del freno y el acelerador a fondo, y cuando la presión llegue a 1.200, soltar rápidamente el freno: el Trackhawk sale disparado a toda velocidad sin que el conductor pierda el control del vehículo en ningún momento.
El Grand Cherokee Trackhawk puede recorrer un cuarto de millas (400 metros) en 11,6 segundos y alcanzar en esa distancia 116 millas por hora (187 kilómetros por hora).
Para transportar la potencia del motor, el Trackhawk está equipado con una transmisión automática TorqueFlite de ocho velocidades modificada para manejar el par motor del Hellcat.
El Trackhawk también incorpora los mayores discos de freno frontales nunca instalados en un Jeep, unos Brembo 498,6 pulgadas cuadradas de superficie (3.217 centímetros cuadrados).
Estos Brembo son capaces de detener el Trackhawk de 60 a 0 millas por hora (100 a 0 kilómetros por hora) en 37 metros.
Las modificaciones en la transmisión o la incorporación de los discos Brembo son sólo algunas de las actualizaciones que ha sufrido el Trackhawk para poder incorporar el Hellcat y sus prestaciones.
Por ejemplo, el cigüeñal ha sido reforzado para poder resistir presiones de cerca de 1.600 psi (libras por pulgada cuadrada) o 100 bares. Los pistones son de aleación forjada. Los tubos de escape, cuatro agrupados en parejas, están refrigerados con sodio y pueden resistir 900 grados centígrados.
El turbocompresor, de 2.388 centímetros cúbicos por revolución, incluye refrigeradores de aire integrados mientras que sus rotores están bañados con polímeros y nanoparticulas resistentes al desgaste.
Y un nuevo sistema refrigeración de baja temperatura ayuda a que el aire absorbido se mantenga a bajas temperaturas (por debajo de 60 grados centígrados) en condiciones de conducción de alto rendimiento a la vez que el flujo de aire se mantiene en 30.000 litros por minuto.
El sistema de tracción total del Trackhawk es el Jeep Quadra-Trac que incluye un diferencial trasero con deslizamiento limitado electrónico.
Además, el sistema Selec-Track configura el sistema de tracción total, la transmisión, la suspensión, la dirección asistida y el cambio de levas de forma independiente para cada uno de los cinco modos de conducción dinámica: Auto, Sport, Track, Tow y Snow.
En el modo Track, los tiempos de cambio de la transmisión se reducen un 68 % a 160 milisegundos mientras que el control de estabilidad, la tracción, la suspensión y la dirección son ajustados para obtener el máximo rendimiento en un circuito. En este modo, el 30 % de la potencia va al eje delantero y el 70 % al trasero.
En el modo Tow, de arrastre, la potencia se distribuye en un 60 % al eje frontal mientras que el 40 % restante va al trasero. Y en Snow, para nieve o hielo, la potencia se reduce y se distribuye a partes iguales entre las ruedas delanteras y las traseras.
