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México apuesta por un economista para la nueva era en la relación con EEUU

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El Gobierno de México designó hoy al economista Gerónimo Gutiérrez como nuevo embajador en EE.UU., en un momento complejo de la relación bilateral por la llegada a la Casa Blanca del republicano Donald Trump, que exige modificar el acuerdo de libre comercio vigente entre los dos países y Canadá.

Gutiérrez, cuyo nombramiento debe ser ratificado por el Senado una vez que obtenga el beneplácito de EE.UU., es la apuesta del nuevo canciller, Luis Videgaray, para hacer frente a los retos que impone Trump en un amplio abanico de temas, entre ellos el comercio, la migración y la seguridad.

Videgaray necesitaba una “persona mucho más cercana a él en modo de actuar, de pensar, que tuviese mucha más interlocución a nivel de la futura Administración” que el embajador saliente, Carlos Manuel Sada, dijo a Efe el analista mexicano Carlos Elizondo.

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Además de esa interlocución política, cuenta con un perfil de economista ante la necesidad de renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), en vigor desde 1994.

En campaña Trump amenazó con cancelar dicho convenio al considerar que destruye la industria y los empleos de su país, pero después matizó su postura al señalar que renegociaría sus términos para beneficiar a su país.

México ha dicho que está dispuesto a entrar a dicha negociación, pero para mejorar el convenio e incluir nuevos sectores, como telecomunicaciones, energía y comercio electrónico.

El próximo embajador en Estados Unidos es actualmente director gerente del Banco de Desarrollo para América del Norte (BDAN), con sede en San Antonio (Texas), una institución creada en el marco del TLCAN (México, Estados Unidos y Canadá).

Cuenta con una maestría en Administración Pública por la Escuela de Gobierno John F. Kennedy de la Universidad de Harvard y ha sido funcionario en las últimas cuatro gestiones presidenciales de México, tanto del conservador Partido Acción Nacional (PAN) como del Revolucionario Institucional (PRI).

En esos Gobiernos ocupó “destacadas posiciones en los ámbitos de comercio, finanzas, relaciones exteriores, así como gobernación y seguridad nacional”, subrayó hoy Cancillería.

Entre 2000 y 2006, durante el Gobierno de Vicente Fox estuvo al frente de la Subsecretaría para América del Norte, mientras que en el de Felipe Calderón (2006-2012) ocupó la Subsecretaría para América Latina y el Caribe de la SRE y la Subsecretaría de Gobierno de la Secretaría de Gobernación.

Aunque Elizondo consideró positivo su nombramiento de cara a “los retos que impone Trump”, lamentó la “enorme inestabilidad” que el Gobierno mexicano ha mostrado respecto a su representante ante EE.UU.

“Si bien se puede justificar un cambio” ante la llegada del republicano al poder “tratando de poner alguien que sea más útil y operativo”, lamentó que se produzca luego de tres embajadores en el mandato de Enrique Peña Nieto (2012-2018) y de haber dejado meses vacía la embajada.

Sada, quien estuvo solo ocho meses al frente de la embajada en Washington, asistirá a la toma de posesión del republicano el próximo 20 de enero y tres días después asumirá como subsecretario para América del Norte de la Cancillería.

Según Elizondo, su “activo mayor era venir de una exitosa carrera consular; conoce muy bien las necesidades y los problemas de los mexicanos radicados en EE.UU.” y fue colocado “en esa posición para tratar de articular a la comunidad dentro del proceso electoral” de EE.UU.

Al vencer Trump en las elecciones del 8 de noviembre pasado, “la visión del Gobierno es que conviene traerlo más como subsecretario y desde aquí coordinar la red consular de México en Estados Unidos”, agregó.

La Secretaría de Relaciones Exteriores destacó la experiencia de Sada en el trabajo consular y en la protección de los derechos de los mexicanos en Norteamérica, así como en la defensa de los intereses de México en el exterior.

Este ingeniero industrial de profesión fue cónsul general de México en las ciudades estadounidenses de Los Ángeles, Nueva York, Chicago y San Antonio, así como en Toronto, Canadá,

Entre 2007 y 2011 se desempeñó como ministro de Asuntos con el Congreso en la Embajada de México en Washington, un cargo que le permitió relacionarse y entender la operación de los órganos legislativos de esa nación.

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