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Arranca la 85 legislatura de Texas con inmigración en centro del debate

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La 85 sesión legislativa de Texas arrancó hoy en el Capitolio estatal con las “ciudades santuario” y la seguridad en la frontera con México en el centro del debate, entre otras cuestiones, con posiciones muy distanciadas entre republicanos y demócratas.

Mientras que varios miembros del Partido Republicano, entre ellos el gobernador de Texas, Greg Abbott, presentaron proyectos de ley para aumentar el control de los inmigrantes, los demócratas pretenden batallar a favor de sus derechos durante esta legislatura.

Sin ir más lejos, Abbott aseguró en diciembre que quiere prohibir en Texas las “ciudades santuario”, un movimiento de urbes estadounidenses que no cumplen las leyes migratorias federales para favorecer la situación de los indocumentados.

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Por otro lado, el Departamento de Seguridad Pública (DPS) de Texas anunció el pasado mes de agosto que necesita cerca de mil millones de dólares, es decir, un 20 % más respecto al anterior ejercicio, para fortalecer la seguridad fronteriza, añadiendo más personal y equipamientos tecnológicos, cuestión que será debatida también próximamente.

La legislatura de Texas se lleva a cabo a través de un cuerpo bicameral compuesto por un Senado de 31 miembros y por una Cámara de Representantes de 150 miembros, que debatirán durante 140 días unos proyectos de ley que, en caso de ser aprobados, entrarán en vigor entre finales de agosto y principios de septiembre.

En términos generales, los republicanos tejanos, con mayoría en el Congreso y el Senado, se mostraron aliviados tras la victoria en las elecciones presidenciales del presidente electo, Donald Trump, que tomará posesión del cargo en diez días, ya que esperan coincidir con él en muchas cuestiones, especialmente en las que se refieren a la seguridad de la frontera.

Por primera vez en ocho años -desde que el presidente demócrata Barack Obama asumió el poder- los republicanos de Texas creen que no estarán en guerra continua con el gobierno federal.

Sin embargo, los legisladores republicanos también son conscientes de que el cambio drástico prometido por Trump durante la campaña, dónde aseguró que iba a construir un muro fronterizo e iba a deportar miles de inmigrantes indocumentados, no ocurrirá de manera inmediata y que deben tener expectativas realistas.

“El presidente Trump no va a arreglar todos nuestros problemas fronterizos el día uno, así que nuestra meta es lograr el control operacional completo de la frontera y deshacernos de los señuelos, como las ‘ciudades santuarios’” dijo el senador estatal republicano Dawn Buckingham en una entrevista con el Texas Tribune el lunes.

Además de las propuestas vinculadas al control de la inmigración, a partir de hoy se estudiarán propuestas relacionadas con el aborto, el acceso a las armas, los derechos de las personas homosexuales o la pena de muerte, entre otras.

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