Anuncio

“Escuchamos un niño de dos años que gritaba” entre escombros, dice voluntaria

Share

En la madrugada de este miércoles, tras las explosiones en el mercado mexicano de pirotecnia de Tultepec, se escuchó entre los escombros los gritos de un niño pequeño, dijo a Efe la voluntaria Beatriz Hernández, una de las primeras civiles en apoyar a las autoridades luego de la tragedia.

“En la noche se escuchaban ruidos, escuchamos a un niño de dos años que gritaba, pero no se podía entrar en la zona, y cuando se entró ya no se escuchaba nada”, explicó Hernández, una vecina de esta ciudad del central Estado de México, colindante con la capital.

Beatriz forma parte de un grupo de voluntarios que se ha situado dentro del mercado de San Pablito y hace acopio de aguas y víveres mientras atiende a los familiares y amigos de desaparecidos, que acuden al lugar en busca de un nombre o una pista que ayude a dar con la persona extraviada.

Anuncio

“Estamos haciendo una labor altruista, somos vecinos de las colonias aledañas, estamos apoyando aquí desde ayer y desde que pasó el siniestro”, explicó la mujer, sin apenas dormir desde anoche.

En el pueblo, relató, están organizados en una mesa directiva, y esta les está proporcionando datos de personas que están registradas como desaparecidas, que cotejan con la lista de atendidos que les llegan de los distintos hospitales donde fueron trasladados los heridos.

Hasta el momento se contabilizan 31 muertos y unos sesenta heridos, en una de las mayores catástrofes en una explosión de la que se tiene registro en México.

En el lugar del siniestro, completamente cercado, hay una enorme presencia de autoridades que no dejan entrar al lugar de la tragedia, entre ellos policías estatales, Ejército, Protección Civil y peritos de la Fiscalía del estado y general.

En la noche, contó Hernández, no se pudo entrar en el lugar de los hechos a remover escombros y buscar posibles supervivientes, pues “había explosiones y salía humo, por lo que no se podía hacer mucho”.

“Hasta ahorita en la mañana, ya que volvieron a entrar (agentes del) Ministerio Público y empezaron a mover cosas, (...) había explosiones pequeñas”, relató, afirmando que dentro del espacio las autoridades están “bien coordinadas”, aunque afuera hay muchos “morbosos” que solo curiosean.

Durante las explosiones, registradas poco antes de las 15.00 hora local (21.00 GMT) del martes, la voluntaria se encontraba en su hogar, a unas calles del suceso, y escuchó un ruido “estridente y muy fuerte” que hizo que varios de los vidrios de las ventanas de su casa estallaran.

Anuncio