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El estado mexicano de Veracruz se declara en emergencia financiera

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El gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes, declaró hoy ese estado mexicano en “emergencia financiera” y amenazó con la suspensión de pagos a los bancos si no se acuerda una quita y un ajuste a las tasas de interés.

Después de doce días de asumir como gobernador, Yunes anunció que renegociará la deuda pública con las instituciones financieras, que asciende a 42.000 millones de pesos (2.063 millones de dólares), para mejorar las condiciones.

En rueda de prensa, garantizó el pago de sus compromisos “siempre y cuando se valore la posibilidad de quita, se ajusten tasas de interés y se convengan pagos a partir de enero a un plazo de seis años”.

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“Se respetarán compromisos siempre y cuando no generen un asunto insostenible para el estado”, dijo este político, quien ganó los comicios de junio pasado postulado por una alianza del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el conservador Acción Nacional (PAN).

Demandó al Gobierno federal una respuesta positiva para encontrar soluciones a la crisis financiera que atraviesa el estado por delitos cometidos por exfuncionarios estatales, quienes habrían contratado créditos a tasas de interés mucho mayores a las del mercado.

Yunes detalló que ni siquiera cuentan con los recursos necesarios para hacer frente a los pagos de fin de año, que incluyen salarios y prestaciones como el aguinaldo, pero garantizó el cumplimiento de esos compromisos a través de un acuerdo con los representantes sindicales.

Precisó que se requieren 10.000 millones de pesos (491 millones de dólares) para pago de sueldos, medicinas, alimentos, combustibles y servicios básicos, pero en caja tienen solo poco más de 3.000 millones de pesos (unos 147 millones de dólares).

Sobre los pagos a proveedores, dijo que habrá “un calendario” para realizarlos y la comprobación de que se ofreció un buen servicio, y advirtió que quienes pretendan cobrar algo que no se entregó al Gobierno serán denunciados penalmente.

Tras una revisión de las finanzas del estado, Yunes dijo que los dos últimos gobiernos de Veracruz llevaron a la quiebra al estado con un aumento del gasto en todo los rubros.

Entre 2010 y 2016 creció en 30.000 millones de pesos (1.454 millones de dólares); la nómina del gobierno se duplicó y la de los maestros subió 45 %, indicó.

Recordó que la Auditoría Superior de la Federación detectó desvíos por 35.000 millones de pesos (1.719 millones de dólares) entre 2011 y 2014, y el mismo órgano estatal ha presentado denuncias por desvíos que suman 23.000 millones de pesos (1.130 millones de dólares).

Además, apuntó, el Gobierno generó deuda de corto plazo con proveedores y contratistas por 56.000 millones de pesos (2.750 millones de dólares).

En tanto, la deuda bancaria en condiciones desfavorables casi se duplicó al pasar de 25.000 millones a 42.000 millones (2.063 millones de dólares) en seis años, es decir, siete veces mayor a la que tiene el estado de Puebla con instituciones financieras.

Afirmó que para 2017 se tiene programado un presupuesto de 101.000 millones de pesos (4.961 millones de pesos), de los cuales más de la mitad corresponden a gasto corriente.

Yunes anunció una serie de medidas para deducir gastos, entre ellas la suspensión de comisiones a sindicatos, la reducción de viáticos y gastos de representación, así como los de comunicación.

En octubre pasado el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, se convirtió en un prófugo de justicia después de que un juez ordenara su captura por los delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero.

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