El expugilista panameño Roberto Durán aseguró que el boxeo ha cambiado

Roberto Durán fue un legendario peleador panameño que siempre dio de qué hablar. ‘Manos de Piedra’ verá su vida plasmada en la pantalla grande cuando el largometraje “Hands of Stone” ruede el viernes en los cines del país. La película es protagonizada por el venezolano Edgar Ramírez (Durán) y el actor Robert De Niro (Ray Arcel) como su entrenador.

‘Manos de Piedra’ habló con HOY Deportes de temas como su rivalidad contra ‘Sugar’ Ray Leonard, el tema del “No Más”, su primer encuentro con su padre y de Mayweather Jr.

¿Se involucró en el proceso de la película?

No vi el libreto, ni me aparecí por la filmación porque no quería que pensaran que yo llegaba a checar las escenas de la. Yo los dejé que hicieran todo a su voluntad.

¿Le atinó Edgar Ramírez al personaje?

Le enseñé ciertas cosas, como que me gustaba cantar, él se puso a cantar, que yo bailaba, él se puso a bailar. Yo tomaba, a él no lo vi tomando. Edgar es un actor que nació para eso y es muy bueno en lo que hace. Su trabajo lo hace perfectamente bien, yo nunca le enseñé nada, absolutamente nada.

Háblenos de esa pasión por el helado.

Siempre me gustaba el helado, pero no es como lo ponen en la película. Eso es mentira, eso fue una sola vez que lo hice en Miami. Esa vez no había nada de comer después de la pelea y comí helado. Cuando yo era chiquito me gustaba comer helado con galleta, esa si era mi pasión. Mi sabor favorito era el de vainilla.

¿Quién le apodó ‘Manos de Piedra’?

Tenía tres entrenadores que eran los hermanos Plomo: ‘Plomito’, ‘Plomo’ y ‘Plomón’. Siempre me entrenaban dos: ‘Plomito’ y ‘Plomo’, que eran los mayores. Ellos discutían que yo noqueaba más con la derecha y luego que no, que era con la izquierda. Apostaron una vez para mi pelea y esa vez noqueé con la derecha y en la siguiente pelea lo hice con la izquierda. Ellos seguían discutiendo y un periodista que se llamaba Alfonso Castillo, los vio discutir y les dijo “esto se acabó ya, ‘Manos de Piedra’”, porque él usa las dos manos”.

¿Dejó Mayweather algo bueno al boxeo?

Él aprendió a defenderse como Roberto Durán, quiera o no quiera. Alguien mandaba un golpe y yo le hacía así (mostrando su hombro). Si tú ves todas mis peleas, eso lo hacía yo. Y si él corría mucho en el ring, eso es problema de él. Es su estilo de pelea y no lo va a cambiar. Para mí, él perdió varias peleas, como contra [Jesús] ‘Chucho’ Castillo.

¿Por qué la gente no acepta el “No Más”?

Eso es problema de la gente, si ellos me quieren creer bien y si no, también. Yo estaba muy gordo, rebajé bastante en poco tiempo (contra Leonard en la segunda pelea), me pegó un calambre en el estómago. En mi mente yo pensé que “pierdo esta pelea, viene la revancha y me preparo mejor y lo desbarato”. Así sucedió y nunca me dio la revancha sino hasta mucho después de 10 años cuando tuve problemas con el IRS. Él me tenía tanto miedo que no quiso pelear conmigo en las 168 libras y me bajó a las 162 en las que me sentía aguado.

¿Está bien el boxeo de hoy en día?

Ya no hay boxeadores como antes, ahora hay más plata. Ahora peleadores regulares hacen buen dinero, pero así es la vida. Francamente no hay peleadores buenos. Seguramente vendrán en un futuro.

¿Se acercó a sus raíces mexicanas?

Mi papá es mexicano y yo tengo las dos sangres. Tengo una familia inmensa con los que viven en Arizona. Hablo con ellos, siempre me dicen que vaya para allá. No he podido ir porque no tengo tiempo, pero siempre no comunicamos.

¿Es el mejor peleador latino de la historia?

Yo sé que era bueno, inteligente. Dentro del ring yo soy muy inteligente, cualquiera que tengo ahí lo agarro y lo desbarato, sea quien sea. En mi concepto soy extraordinario.

¿Quién fue su modelo como peleador?

Un boxeador extraordinario que tuvo Panamá, que gracias a Dios aún está vivo, y se llama Ismael Laguna. Era tremendo.

Así conoció a De Niro…

“Nadie sabe esta historia pero a Robert lo conocí una vez que estuvimos en un parque jugando softbol. Era el tiempo en que iba a pelear en el Madison Square Garden.

Estábamos sentados esperando a [Roberto] ‘Flaco Bala’ [Hernández] para ir a comer, porque con el estómago vacío no se puede jugar. Vemos que llega una persona y pensamos que era ‘Flaco Bala’. Quedé sorprendido cuando vi que era Robert De Niro, él no me conoció enseguida y luego dijeron quién era yo y ya supo. De Niro quería jugar y ‘Flaco Bala’ organizó para que jugáramos en contra.

Después de media hora de juego se aparecieron muchos artistas que eran parte de la película “Cazador de Venados” (The Deer Hunter) y yo me quedé así (con la lengua afuera). Apostamos la comida y les pasamos por encima, acabamos con ellos. Me dijo De Niro ‘vamos al restaurante que tú quieras’.

Fuimos a un café cerca de ahí. Nos pusieron unas mesas y me dijo Robert que me sentara con él. Pidió champaña para todos. La cuenta fue como de $7,000 y el dueño del local me quería como si fuera mi papá dijo: “Señor De Niro, si usted es amigo de Durán, entonces usted no paga aquí, solo dejen propinas para mis meseros”. Les dejó $3,000. Esa noche me invitó a una fiesta y hemos sido amigos desde entonces.