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ENTREVISTA: Lothar Matthäus dice que los mexicanos están ‘muy seguros de ganar’

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El alemán Lothar Matthäus cinco veces mundialista y campeón del mundo, recuerda una reunión que tuvo hace unos meses en la Ciudad de México. Estuvo ahí por día y medio para un evento promocional y ahí se reunió con gente de futbol de México y periodistas. Ahí escuchó algo que le llamó mucho la atención.

“Estaban pensando que iban a ganar la Copa América. Les decía, ‘¿por qué están tan seguros? Si le van a jugar a Argentina, Brasil, Chile’”, recordó el mundialista de España 1982, México 1986, Italia 1990, Estados Unidos 1994 y Francia 1998.

Ante la insistencia de los periodistas mexicanos en aquella cena, Matthäus les dijo: “‘¿Están seguros que son los favoritos?’, ‘Sí’ me decían. Estaban pensando que iban a ganar el torneo, todos estaban pensando eso. Y luego perdieron 7-0. ¿Cómo puedes estar tan seguro? Está bien, tienen buenos jugadores, ‘Chicharito’ es una estrella grande. Pero Chile tiene buenos jugadores, Argentina tienen buenos jugadores, todos tienen buenos jugadores y no solo ‘Chicharito’”.

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“Nunca debes de estar seguro. Tienes que respetar a los otros países también. Puedes decir que puedes ganar pero no puedes estar seguro. Cuando nosotros vamos al Mundial, somos uno de los favoritos, no somos ‘el favorito’. Eso hace las cosas más fácil y los jugadores lo sienten. Cuando el país piensa que tienen que ganar, ellos lo sienten”, agregó el campeón del mundo en Italia 1990.

Matthäus es el único jugador de cancha en jugar cinco mundiales. El otro es un portero, la Antonio ‘Tota’ Carbajal, de México. De clasificar el Tricolor al Mundial y si Rafael Márquez es convocado para esa competencia, empataría el récord de ambos.

Matthäus describió el jugar cinco Copas como una bendición.

“Es un favor, es como un regalo de alguien el poder jugar por tanto tiempo a ese nivel. Espero que Rafa Márquez juegue un quinto mundial, no soy egoísta, no soy alguien que no quiere que alguien logre eso”, expresó Matthäus durante un visita a Los Ángeles.

El alemán se encuentra en L.A. como embajador de la Bundesliga, la cual se transmite por FOX y FOX Deportes. Matthäus habló con HOY Deportes de varios temas, como aquel partido de cuartos de final ante México en México 1986, Diego Maradona, Lionel Messi, entre otras cosas.

¿A qué te dedicas?

Estamos promoviendo la Bundesliga, somos socios con FOX Sports, queremos que la gente de EE.UU. sepa del futbol de Alemania. No solo tenemos al Bayern Múnich, tenemos muy buenos jugadores. Ahora muchos mexicanos siguen a la Bundesliga por ‘Chicharito’, lo mismo pasaba con los españoles con Pep Guardiola. Carlo Ancelotti ahora que está en Bayern Múnich seguramente significa algo para los italianos. Tenemos estadios muy bonitos, un futbol muy rápido, un futbol diferente que en otros países. Siempre jugamos para ganar y para atacar y lo puedes ver en el número de goles en los partidos.

¿Qué tanto ha cambiado la Bundesliga?

Ha cambiado mucho. Cuando yo jugaba no era tan cómodo como ahora. En nuestro tiempo éramos gente más privada, no tan pública, no teníamos la infraestructura que ahora tienen. Ahora están muy cómodos por el club y el club también recibe mucho de los jugadores. Ahora tienen lo mejor desde los zapatos, doctores, medicina, todo. El club les da todo. Cuando yo empecé tenía que encontrar mi apartamento yo solo.

El futbol no era tan rápido, tampoco teníamos 22 jugadores del equipo nacional en el Bayern Múnich, solamente teníamos buenos jugadores en los primeros 18, no tanto en las reservas, pero ahora son todos.

¿Las redes sociales son una distracción?

Es el tiempo que ha cambiado. El futbol tiene que cambiar cuando el mundo cambia. El futbol ha hecho mucho dinero gracias a las redes sociales.

Diego Maradona dijo que fuiste su mejor rival, ¿piensas lo mismo de él?

Teníamos respeto muto. Jugamos dos finales de mundiales en contra. En el mismo tiempo que él jugó con el Napoli yo jugué con el Inter. Teníamos muchas peleas pero al final siempre nos dábamos la mano. Diego me respetaba porque siempre lo detenía sin querer matarlo, no como otros jugadores que querían golpearlo. Siempre lo enfrentaba de frente, mientras otros lo atacaban por detrás. Pero teníamos muy buenos jugadores a nuestro alrededor. Hoy en día solo se habla de Messi y Ronaldo pero hay buenos jugadores a su alrededor también. En nuestros tiempos los medios en todo el mundo hablaban de Maradona y yo, pero habían otros muy buenos jugadores como Marco Van Basten, Gary Lineker, Ruud Gullit, pero necesitas siempre un buen equipo. Cuando tienes a un buen equipo, resaltas más.

¿Es injusto comparar a Maradona con Messi?

Maradona era el mejor jugador en el tiempo en el que jugué durante 10 años, al igual que Messi ahora.

¿Qué hace a Alemania tan buena en Mundiales?

Siempre estamos en la mejor forma. Ganamos contra otros equipos por nuestra mentalidad. Estamos enfocados. Hay veces que no tienes la suerte a tu favor y pierdes, como contra Francia en la Eurocopa 2016. Tenemos la mentalidad al jugar en el momento. Físicamente somos el equipo más fuerte antes del torneo. Tienes que tener un buen balance entre la mentalidad y el físico. Si físicamente no estás en buena condición, no vas a poder ganar un juego y menos un torneo. Lo mismo es con la mentalidad, tienes que creer en la calidad de los jugadores. En Alemania hemos hecho esto muy bien, pero esto no pasa cuando tienes 22 años, sino cuando estás en las escuelas, en las academias.

¿Qué recuerdos tienes de la final de Italia 1990?

Fue el mejor momento de mi carrera y ganamos el Mundial. Es lo mejor que puedes vivir como jugador. Ganar el torneo depende de muchas cosas, pero creo que Alemania era el mejor equipo en ese Mundial, desde el primer juego hasta el último. Tuvimos un poco de suerte cuando nos marcaron el penal porque si no lo hubieran pitado nadie hubieran dicho algo. Pero habíamos trabajado mucho para tener ese resultado.

¿Qué Mundial te gustó más?

Cuando tienes el mejor resultado es el que gozas más, pero cada uno tiene un muy buen recuerdo. El de México me gustó porque era el primero que tuve en el equipo titular. En 1982 estaba en la banca, era muy joven. El de 1986 estuve en el más alto nivel. En 1990 fue bueno porque no fue solamente el título, sino cómo ganamos el título y el ambiente. Los 23 jugadores estábamos enfocados en una sola cosa: ganar.

¿Qué opinas del trabajo de Jurgen Klinsmann con Estados Unidos?

Creo que Jurgen ha hecho un buen trabajo aquí. Creo que ha hecho dinero por su pasado, como jugador. La Federación de Estados Unidos tiene que seguirlo, hacer lo que él dice. Seguramente que no puede ganar todos los partidos, los estadounidenses no pueden pensar en el título del mundo porque es un país muy joven en futbol, además no es el deporte número uno. Jurgen no está en una posición como en Brasil, México, España, donde el futbol es el número uno. Creo que está mejorando, va a necesitar tiempo, confianza, sabe lo que está haciendo. No es estúpido. Es un buen entrenador, puede motivar a los jugadores, es un buen motivador, se puede comunicar con los jugadores.

¿Tenías buena comunicación con él en Alemania?

No éramos los mejores amigos, pero no era un problema. Él tenía su forma de ver el futbol y yo la mía. Jugamos en tres equipos juntos en Bayern Múnich, en Inter de Milán y en Alemania. Cuando jugamos juntos tuvimos siempre buenos resultados. Sacamos ventaja de nosotros mismos.

¿Qué recuerdas de México 1986 y el partido ante el Tri en cuartos?

Me encantó jugar en este torneo y cómo jugué. Los mexicanos creo que nada más anotaron uno. No tuvimos que tirar el quinto porque estuvimos perfectos. Fue un partido muy difícil, cada uno de nosotros estaba pensando en dar todo, hasta el último minuto. Estuvimos más concentrados ese día y no teníamos tanta presión.

¿Perjudica ser local en un Mundial?

Parece que sí, lo vi en Brasil hace dos años, lo mismo pasó con Francia en la Eurocopa. Desde el inicio no pensé que los franceses jugaban libres. Yo no sentía presión porque amaba el deporte, siempre daba lo mejor por mí, por mi familia, por mi país. Cuando estaban los aficionados detrás de mí, había más motivación.

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