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Danilo Gallinari no está listo para perdonar a los que lo olvidaron y dudaban de él

Danilo Gallinari #8 of the LA Clippers reacts after the ball goes out of bounds during the first half against the Utah Jazz at Staples Center on April 10, 2019 in Los Angeles, California.

Danilo Gallinari #8 of the LA Clippers reacts after the ball goes out of bounds during the first half against the Utah Jazz at Staples Center on April 10, 2019 in Los Angeles, California.

(Harry How / Getty Images)
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Podrías ser perdonado si pensaste que la carrera de Danilo Gallinari estaba acabada.

Tal vez pensaste que las lesiones fueron demasiadas – esas en su espalda, rodillas, tendones y músculos. Tal vez pensaste que su primera temporada con los Clippers, en la que jugó solo 21 partidos, lo definieron a él como un tirador ineficiente, que resultaría en estar más tiempo en el gimnasio más que en la duela.

No eras el único que pensó eso.

Solo que no esperes el perdón de Gallinari.

“Si ellos se olvidan de mi”, dijo Gallinari, “o son estúpidos o tienen problemas de memoria”.

Considérese recordado.

Los Clippers regresarán a los playoffs esta temporada después de un año de ausencia con Gallinari como una de sus principales razones. El viernes pasado fue su partido número 67 de la temporada, más que cualquier temporada desde el 2012-13 y el tercero más alto de su carrera.

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Nunca había anotado más (19.8 puntos por juego), lanzado mejor (46.3% desde el piso) o atrapó más rebotes (6.2) en sus 11 años de carrera.

Gallineri habló sobre el camino de su carrera con The Times durante una visita reciente a Eataly L.A. en Century City. Es claro que quiere quedarse en Los Ángeles – tiene un año más en su contrato – pero si los Clippers son capaces de obtener varios agentes libres de alto nivel, Gallinari sabe que podría estar despidiéndose.

“Me siento bien sobre esta franquicia, acerca de este equipo”, dijo en una conversación en la azotea del restaurante Terra. “No sé qué es lo que tienen en sus planes. Solo soy un espectador. Quiero otro año en mi contrato. Si puedo ser parte de este equipo por un largo período… esa es mi meta. Es mi sueño”.

No parece que el futuro de Gallinari estuvo alguna vez en duda. Su padre, Vittorio, se convirtió en profesional en Italia el mismo día que Gallinari empezó a jugar debido a una combinación de talento natural y tamaño. Él firmó con un equipo antes de sus 13 años. A los 17, estaba jugando para un equipo cuyo dueño era Giorgio Armani. A los 19, los Knicks de Nueva York lo obtuvieron con la sexta selección en el draft de la NBA del 2008.

“Mi opinión sobre él no ha cambiado desde el primer día que lo vi y lo elegimos en el draft en Nueva York”, dijo Mike D’Antoni, quien lo entrenó en los Knicks ese tiempo y quien fue compañero del padre de Gallinari en Milán.

“Él es un gran jugador y si se mantiene saludable, todos los verán más”.

La NBA no lo vio de inmediato por su lesión en la espalda que sostuvo en el entrenamiento antes del draft que le costó gran parte de su temporada como novato.

La lesión fue tan dolorosa que Gallinari dijo que no podía dormir más de dos horas en l anoche. El sentarse también era muy incómodo. Su mamá ponía dos toallas en el piso para que su hijo de 6’10” de altura pudiera arrodillarse a desayunar lo que ella le preparó.

“Fue tal vez – no, seguro que sí – los peores siete u ocho meses de mi vida”, dijo. “No le desearía eso a mí peor enemigo”.

Gallinari pudo demostrar lo suficiente en su segunda temporada, en la que fue enviado a Denver como parte de un canjeo por Carmelo Anthony. Gallinari jugó un poco más de cinco temporadas en Denver – y no jugó una completa debido a un ligamento cruzado anterior desgarrado – promediando 16.2 puntos y alcanzando los playoffs en dos ocasiones. Pero lanzó solo 38% en la postemporada y nunca pudo pasar la primera ronda.

Entonces, una lesión en su glúteo le dañó su fresco inicio en Los Ángeles.

“Fue otro reto”, dijo.

Esta temporada, entrenadores y scouts alrededor de la NBA han visto el potencial de Gallinari en ambos lados de la duela.

“Nunca hablan de mi defensa”, dijo Gallinari. “Pero cada entrenador para el que he jugado, les hago decir ‘Oh, no sabía de tu defensiva. Te vamos a poner en los mejores jugadores. Y el otro equipo cree que no eres tan bueno, entonces te atacan, pero a nosotros nos gusta eso’”.

El entrenador de Brooklyn, Kenny Atkinson, dijo que era uno de esos que él pensaba que causaban desajustes a sus rivales.

“Tiene un talento élite. ¿Qué muchachos, con 6’10”, pueden manejar la bola, lanzar la bola, anotar la manera como él lo hace? Y pienso que es un defensor subestimado. Tienen que haber sido por lo menos 10 veces que lo aislamos y no pudimos pasarle”, dijo Atkinson. “Gallo es muy bueno usando su longitud e inteligencia y tiene más velocidad en sus pies de lo que piensas. Él es así de bueno”.

Cuando los playoffs empiecen la próxima semana, él jugará sus primeros minutos en postemporada desde 2012 y el DJ en Staples sonará un coro de una canción tributo que unos amigos suecos de Gallinari escribieron para él.

“Danilooo Gallinariii” sonará en los altavoces, y en un gran escenario, todos sabrán que él está de regreso.

“Las lesiones pasan”, dijo. “Tienes que lidiar con eso”.

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