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Dos códigos de enseñanzas guiaron a Jhon Bedoya para ser un ‘soldado samurái’ en el octágono

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Jhon Bedoya era un estudiante como cualquier otro y tenía planes de seguir estudiando a nivel universitario tan pronto terminara la secundaria. Sin embargo, por mucho tiempo, el servicio militar era y es aún obligatorio en su natal Colombia para el estudiante que termina sus estudios escolares.

Bedoya entonces fue reclutado y tuvo que prestar servicio militar en el ejército nacional colombiano por un año, en tres batallones en el departamento de Cundinamarca, cerca de Bogotá, de donde es oriundo y actualmente reside.

“Cuando pasé por el ejército, eso me incentivó mucho la parte atlética, de disciplina, del respeto y más que todo la parte física y acondicionamiento”, explicó el peleador de artes marciales mixtas (MMA) a HOY Deportes en Fresno, en donde participó el pasado viernes en el torneo de Copa Combate de Combate Américas.

Aunque se sentía obligado a prestar el servicio militar, ‘Ronin’ aprovechó la oportunidad para aprender cosas nuevas que eventualmente le abrieron el camino al deporte que le interesaba desde muy temprana edad.

“Me interesó mucho la parte deportiva como tal”, recordó. “Desde que salí del ejército, encontré las artes marciales, que era desde pequeño uno de mis objetivos iniciales”.

La convivencia entre los soldados le sirvió para aprender de la cultura militar, a la que consideró como física, de mucha disciplina y respeto.

A su salida y dedicarse al MMA, Bedoya aprendió otro “código... El de los samuráis”, señaló el peso pluma.

“Ser honesto, ser responsable… pero cuando se trata de guerra, de lucha, pues ya es un aspecto diferente porque o es él o eres tú. Es un momento decisivo en el cual tienes que demostrar todo lo que has hecho, que has trabajado, entrenado”.

Bedoya destacó que entre sus estudios aprendió del “bushido”, que es el código tradicional de honor, disciplina y moralidad de un samurái, y es de ahí que nace su apodo de ‘Ronin’.

Pablo Hernández, quien lo entrena en uno de los gimnasios más reconocidos en el país cafetero, Octagon MMA en Bogotá, fue su mayor influencia para fortalecer la disciplina que había adquirido durante su corta carrera militar al adicionarle las influencias japonesas.

“Él me enseñó que esto no es para darse lujos, insultar a la gente o dárselas de que soy un peleador y te puedo ganar… sino que este es un camino de un guerrero, de bajo perfil”, dijo ‘Ronin’.

Bedoya llegó a Copa Combate como el peleador de menos experiencia, pues su récord de 6-0 era el de menor número a comparación de sus colegas. El colombiano perdió por sumisión en Cuartos de Final, que era la primera etapa, contra uno de los favoritos del torneo, el mexicano Alejandro Flores, quien cayó en la final ante el estadounidense Andrés Quintana.

Sigue a Jad en Twitter, Instagram y Facebook: @jadelreda

 

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