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Calvario migrante: “la crisis ha llegado a tal punto que los albergues se han convertido en sepulcros”

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Desde octubre de 2015, organizaciones civiles han documentado 34 casos de abusos a personas migrantes cometidos por guardias privados de seguridad de los trenes de carga, revelaron el domingo defensores de derechos humanos durante un foro en la Universidad Iberoamericana.

La Estancia del Migrante González y Martínez en Tequisquiapan, Querétaro, ha registrado dos asesinatos y 22 casos de personas migrantes baleadas por guardias de seguridad en el ferrocarril, entre ellas dos menores de edad.

En tanto, la organización SMR Scalabrinianas (Misión para personas Migrantes y Mexicanas) ha documentado 10 casos de migrantes heridos por impacto de bala.

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“La indicación es tirar a matar”, afirmó la hermana Leticia Gutiérrez, de SMR Scalabrinianas.

Durante el foro “Asilo y personas refugiadas frente al desplazamiento forzado”, precisó que estos abusos han ocurrido en Estado de México, Querétaro, Jalisco, Hidalgo, Guanajuato, Tlaxcala y Nuevo León.

De acuerdo con directores de albergues, hasta el momento han identificado a tres empresas de seguridad en las que su personal agrede a los indocumentados: CUSAEM, SEPROMEX y SEICSA.

“Estos guardias de seguridad bajan a los migrantes o simplemente en el mismo tren les están tirando a matar. ¿Cómo entender que ante una crisis humanitaria la respuesta sea paramilitar, de exterminio?”, cuestionó la religiosa.

Martín Martínez, fundador de la Estancia del Migrante González y Martínez, sugirió que éstas corporaciones de seguridad privada actúan con la anuencia del Estado.

En su intervención, Pedro Pantoja, director de la Casa del Migrante de Saltillo, criticó la política migratoria y dijo que la crisis ha llegado a tal punto que los albergues se han convertido en sepulcros.

“En 2015 llegaron a morir tres migrantes en nuestra casa. Dos de ellos, después de ser golpeados y enfermos, nos dijeron cuando llegaron ‘déjenos morir aquí, queremos un lugar digno para morir’. Y ahí murieron”, comentó.

El obispo de Saltillo, Raúl Vera, señaló que en el tema migratorio no es posible trabajar con el Estado cuando éste no facilita el acceso a la justicia.

Ante esta situación, Alejandro Solalinde, director del albergue Hermanos en el Camino, hizo referencia a viernes negro de Enrique Peña Nieto en la Ibero y llamó a los estudiantes a organizarse para fomentar el cambio en materia migratoria.

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