La iglesia mexicana pide trabajo conjunto para regenerar el tejido social

La Arquidiócesis Primada de México pidió hoy que el Gobierno mexicano, la iniciativa privada y la sociedad civil trabajen de manera conjunta para ayudar a la reconstrucción del tejido social en este país.

Además señaló que la llegada del izquierdista Andrés Manuel López Obrador a la presidencia a generado un “clima de esperanza” que se puede perder si no se trabaja.

“Con la alternancia en el poder, se vive en México un clima de esperanza, que, sin embargo, podría irse a pique si no se trabaja concienzudamente en las sinergias necesarias entre gobierno, iniciativa privada y sociedad civil, que abonen a la reconstrucción del tejido social”, señaló la Arquidiócesis en el editorial del semanario Desde la Fe, de este domingo.

En el texto se apuntó que “A México le duelen los asesinatos y las desapariciones, las violaciones sistemáticas a los derechos humanos, el crimen organizado, que pervierte todas las estructuras,

Además de “la corrupción y la impunidad de la clase política, la pobreza y la migración, la degradación de los valores morales, pero sobre todo, la desconfianza que ha permeado en la sociedad y que afecta al trabajo conjunto para el desarrollo integral del país”.

El editorial señaló como preocupante “la falta de confianza de la sociedad en las instituciones públicas, principalmente en aquellas que tienen la responsabilidad de velar por la justicia y la seguridad”.

Según estimaciones desde que el Gobierno mexicano inició en 2006 una guerra contra el narcotráfico, más de 200.000 personas han muerto y los registros oficiales indican que al menos unas 37.000 personas permanecen no localizadas o desaparecidas.

Bajo el mandato de Enrique Peña Nieto (2012-2018), del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el caso más mediático fue la desaparición en 2014 de los 43 estudiantes de la escuela para maestros de Ayotzinapa, en Guerrero.

“El Gobierno, en todos los niveles, enfrenta en este sentido quizá el mayor de los desafíos, pues los mexicanos han demostrado no estar dispuestos a seguir cediendo sus espacios públicos a la delincuencia organizada, con el riesgo que esto conlleva para las estructuras gubernamentales y para la sociedad misma”, expresó.

La Arquidiócesis dijo que “la Iglesia tiene una gran responsabilidad en el devenir nacional y que si desea colaborar como institución en la reconstrucción del tejido social, debe comenzar con la autocrítica y el ataque frontal a todo lo que no va de acuerdo con su misión”.