LAUSD debe pagar $6 millones a dos niños que fueron abusados sexualmente

Dos niños que fueron sexualmente abusados por un maestro del Distrito Escolar Unificado de Los Angeles (LAUSD) recibirán tres millones de dólares de compensación cada uno.

Solo bastaron unas horas para que un jurado concluyera que el Distrito Escolar deben de pagar mucho más de lo que originalmente les había ofrecido para compensar por el abuso de Paul Chapel III, un exmaestro de tercer grado de la escuela Telfair Elementary en la ciudad de Pacoima.

Actualmente Chapel III está cumpliendo una condena de 25 años en prisión después de haber sido convicto por haber realizado actos lascivos con 13 niños.

El Distrito Escolar ha aceptado la responsabilidad por negligencia, falta de supervisión y retención de Chapel III, quien fue acusado por besar y manosear ambos menores -- a uno en sus genitales-- durante el periodo escolar de 2010-2011. Sin embargo, había ofrecido 490 mil dólares para un estudiante y un poco menos para el otro, mientras que los abogados de las víctimas habían solicitado más de cinco millones por cada uno.

John Manly, abogado de los niños, elogió al jurado y arremetió contra el Distrito Escolar diciendo que el LAUSD quería resolver el caso por menos dinero.

“Este es un golpe directo a l distrito”, dijo Manly. “Lo que estamos viendo es que los miembros del jurado en la ciudad no van a respaldar a los Distritos Escolares que no resuelvan el problema de los abusadores sexuales efectivamente.

Los funcionarios del distrito no respondieron inmediatamente a las llamadas del Times.

Craig Barnes, representante del distrito, le dijo al jurado que los menores ya habían terminado sus tratamientos médicos y aparentemente están respondiendo bien, con buenos resultados académicos, y con sueños de convertirse en doctores y practicar con su patineta y el básquetbol.

La compensación que recibirán les ayudará a los niños para pagar los gastos médicos, tutoría, tours a las universidades, escuelas de verano, viajes y colegiatura a universidades de primer nivel.

Sin embargo, Vince Finaldi, abogado que también representa a los estudiantes, le recordó al jurado que uno de los niños todavía tenía recuerdos muy presentes, pesadillas del maestro persiguiéndolo y que ya no podía confiar en los docentes. Y la otra víctima, quien habla menos del abuso, está temeroso de que pudiera ser raptado.

“Estas cicatrices de los abusos sexuales nunca se borrarán”, dijo Finaldi. “Esto es un asesinato emocional a una parte de tu vida”.

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