Jimmy Morales: “Los ataques ya empezaron”

“Soy político, pero no soy corrupto”, dijo Jimmy Morales, el candidato presidencial triunfador en la primera vuelta electoral de Guatemala al ofrecer su primera entrevista en Los Ángeles, previa al desfile centroamericano que se llevo a cabo este domingo en las principales calles de la urbe angelina. “Soy un político diferente, de una generación que sabe que no hay que vender la patria para llegar a la Presidencia”.

Atacado por sectores que consideran que no tiene experiencia para gobernar, Morales dijo que los ataques vienen de personas que no le daban ninguna oportunidad y que en las urnas, fueron derrotados.

A pesar de que las encuestas lo ubicaban en el tercer lugar, por detrás del multimillonario Manuel Baldizón y de la ex primera dama, Sandra Torres, el conteo de los votos lo ubicó en el primer sitio con el 25 por ciento de los sufragios, obligando a una segunda vuelta electoral que se llevará a cabo el 25 de octubre.

“Los ataques son permanente”, aseguro, mientras saludaba a sus seguidores que se fueron acercando en el lobby del hotel Grand, donde se llevo a cabo la entrevista.

“Me están acusando de ser un hombre acaudalado, de tener riquezas y relojes de marca cara, como los Rolex”, dijo Morales, al tiempo que mostraba el reloj que traía puesto. “Mira, este reloj es el más caro que tengo, es un Bulova... los relojes que yo uso son los mismos que usa la clase media”.

Recién llegado del aeropuerto que lo trajo de una extensa gira por Rhode Island, Nueva York y otras regiones del este de Estados Unidos, Morales, dijo que los principales ataques que está recibiendo es que no tiene un proyecto político y económico definido, a lo que respondió: “Claro que lo tengo, y dentro de ese proyecto político se encuentra seguir la lucha contra la corrupción y fomentar el desarrollo económico del país, ofreciendo a los guatemaltecos, oportunidades laborales que hagan innecesario emigrar en busca de una mejor calidad de vida.

“Mis rivales políticos aseguran que no tengo equipo, y al menos he sido honesto cuando digo que estoy buscando a los mejores profesionistas y técnicos que me ayuden a gobernar en las difíciles condiciones actuales”.

Jimmy Morales se llama oficialmente James Ernesto Morales Cabrera. Profesa la religión cristina evangélica y nació el 18 de marzo de 1969. Tiene un título en administración de negocios y otro en teología.

En cuanto a los rumores que lo han vinculado a las altas cúpulas militares, Morales enfatizo que no tiene ninguna relación con las fuerzas armadas, aunque dijo, no tiene nada en contra de ellas. “Mas bien hay que preguntarle a Sandra Torres el papel que jugó cuando la guerra, ella si tomo un arma, yo no”, dijo.

Previo a las elecciones Morales realizo extensas giras de trabajo por Estados Unidos, y estableció nexos con las organizaciones de guatemaltecos en el exterior, mismas que han pedido su derecho al voto. “Claro que estoy en favor de que puedan elegir a sus representantes, pero voy mas allá, ellos deben tener derecho, como dice nuestra Constitución de elegir y ser electos, por eso, la propuesta debe ir mas allá y debe crearse la infraestructura para que puedan también ser electos, nuestra lucha no puede terminar en darles un Documento Nacional de Identidad para que puedan votar”.

Del polémico programa de la Alianza para la Prosperidad que ha impulsado el gobierno de Estados Unidos para tratar de frenar la migración a este país, Morales dijo que ha tenido contactos ya con el embajador de Estados Unidos en Guatemala, Todd Robinson, para analizar las características del programa. “La inversión que proponen es de mil millones de dólares, y por cada dólar invertido, Guatemala podría recibir 2 dólares, que servirían para crear empleos e infraestructura que ayuden a mejorar la calidad de vida de los guatemaltecos, es un programa interesante que hay que analizar, nadie quiere seguir viendo guatemaltecos muriendo por el camino en busca de su sueño”.

La entrevista termina abruptamente. Sus ayudantes lo escoltan para que participe en el desfile centroamericano que ya lo esperaba con las marimbas listas.